Trabajadores y representantes de la APA del colegio Severo Ochoa estudiará en estos días los factores que determinan que el centro concertado sea objeto de un elevado número de robos: hasta tres se han contabilizado en los últimos dos años aproximadamente, en los que los ladrones han sustraído diverso material de diferente cuantía económica. El último de ellos se produjo la pasada semana cuando dos sujetos penetraron en el interior del centro consiguiendo sustraer unos diez ordenadores y dándose a la fuga con la ayuda de un cómplice que les aguardaba a la salida del colegio en un vehículo, tal y como ya adelantó ‘El Faro’. Desde el centro han querido aclarar que la alarma antirrobo se activó en el momento en que entraron los ladrones lo que les permitió huir mientras llegaba la empresa de seguridad. Tras inspeccionar y comprobar que no había nadie en el centro, los vigilantes abandonaron las instalaciones al parecer “sin conectar la alarma”, según apuntan fuentes del Severo Ochoa, lo que llevó a que los ladrones volvieran a introducirse en el colegio “y actuaron a sus anchas durante dos horas”, explican las mismas fuentes. El robo, añaden, fue descubierto a las 8.30 horas, y sobre la una del mediodía se personaron en el lugar de los hechos agentes de la Policía Judicial y la Científica para iniciar la investigación tendente a la detención de los individuos.
Los ladrones forzaron dos puertas y se dirigieron directamente hacia la sala de informática, lo que demuestra que, o bien se trata de antiguos alumnos, o conocían el interior del centro.
Desde el Severo Ochoa tienen intención de zanjar de una vez por todas el asunto, “ya no sólo a nivel escolar, sino también de barriada”, por lo que, en estos días mantendrán un encuentro todas las partes afectadas para, posteriormente, trasladar la problemática a las entidades que ostenten alguna competencia para solucionar el tema.
La Policía localizó huellas en el interior del centro, además de contarse con las imágenes que las cámaras de seguridad grabaron en las que se aprecian todos los movimientos de los ladrones desde su entrada en el colegio hasta que logran huir con el botín.