Traficoport ha recibido, por tercer año consecutivo, el encargo de la Autoridad Portuaria de ordenar, coordinar y controlar el tráfico marítimo en las aguas de su competencia. La sociedad mercantil renueva así, por otros doce meses, el contrato que ostenta desde junio de 2013 al considerar el ente que preside José Torrado que su oferta era la que más se ajustaba al pliego de condiciones que ha regulado el proceso de licitación del servicio. Los trabajos están tasados en 300.000 euros (IPSI incluido) y podrán prolongarse durante un año más, sin ambas partes lo consideran oportuno, por un montante idéntico.
La Autoridad Portuaria abrió el plazo de recepción de ofertas a finales de marzo, tras la publicación del anuncio en el BOE. Se optó entonces por la fórmula de la asistencia técnica al detectarse que ésta no contaba con “personal suficiente ni con los conocimientos ni la formación precisa para prestar convenientemente el servicio” y por no estar “prevista tampoco la dotación de nueva plantilla para desarrollar al completo las labores que el mismo requiere”. Traducido, el organismo estatal se decantaba de nuevo por la externalización.
Adjudicado ya el servicio, Traficoport volverá a encargarse de la ordenación del tráfico marítimo en la zona de competencia del Puerto, incluyendo la comunicación a todas las embarcaciones de las instrucciones, normas y reglamentos vigentes, así como del seguimiento y la lectura de las señales procedentes de los sistemas de datos (Radar y AIS). En cuanto a la coordinación, difundirá a los buques y otros usuarios información sobre condiciones meteorológicas, pero también velará por un intercambio de datos “preciso y adecuado” en casos de emergencias o sucesos que conlleven contaminaciones por vertidos al mar.
La tercera gran parcela de su cometido, la relativa al control del tráfico, incide en la recopilación de información general o de posibles incidencias, así como la toma de datos sobre horarios de prestación de servicios o la supervisión de los momentos exactos de entrada y salida del puerto.
La empresa volverá a operar desde la Torre de Control del Puerto, en el Muelle de España, que también acoge la Capitanía Marítima del Puerto y el Centro de Coordinación de Servicios.
Un relevo tras una década de trabajo ininterrumpido Traficoport se hizo con la ordenación y coordinación del tráfico marítimo hace ahora dos años, cuando la Autoridad Portuaria decidió abrir un nuevo proceso de adjudicación que, en la práctica, supuso el fin de la presencia en la Torre de Control de Corporación de Prácticos del Puerto, la empresa que había gestionado el servicio desde 2002. Traficoport fue la única candidata que cumplió las nuevas condiciones en 2013, como ocurrió también a mediados de 2014.
La seguridad “durante las 24 horas”, uno de los cometidos La condiciones fijadas en las bases del contrato ponen especial énfasis en que la empresa adjudicataria debe planificar los movimientos de buques “y otros artefactos flotantes” en las aguas competencia de la Autoridad Portuaria de Ceuta con la debida antelación para que el tráfico fluya “con seguridad y eficacia” y se eviten “situaciones peligrosas”.
Traficoport deberá cumplir ese cometido, además, durante las 24 horas del día y siempre sometido a un horario prefijado de turnos que será aprobado y supervisado por el propio organismo estatal. Las bases también establecen que será el adjudicatario quien deberá proveerse a sí mismo del personal necesario para la correcta ejecución del servicio, sin que esos trabajadores contraigan ningún tipo de relación laboral ni jurídica con el Puerto.
Los controladores que operan en la Torre de Control son titulados de Marina Mercante y cuentan con experiencia y acreditación en el trabajo que desarrollan en esas instalaciones. Los efectivos se encargan de controlar el tráfico marítimo portuario en aguas de la ciudad autónoma. Entre los requisitos acreditados por la adjudicataria, se encuentra la solvencia técnica, la titulación de sus profesionales así como la experiencia en el servicio que prestan, condición considerada por el Puerto fundamental dada la alta tasa de actividad que registran las aguas locales.