El calendario de este ejercicio supone un retraso de casi un mes con respecto a los plazos en los que habitualmente se ha puesto en marcha este proceso. El año pasado, por ejemplo, el plazo de presentación de solicitudes se extendió desde el 17 de abril hasta el 3 de mayo.
En lo que no se auguran cambios, según prevé la Dirección Provincial, es en los criterios que se utilicen para la adscripción de alumnos a cada centro con el fin de “garantizar el derecho a la educación, el acceso en condiciones de igualdad y la libertad de elección de centro por parte de las familias, atendiendo a una adecuada y equilibrada distribución de los alumnos con necesidad específica de apoyo educativo”.
Para ser admitido en un centro docente público o privado concertado será necesario “reunir los requisitos de edad” y, en su caso, los requisitos académicos exigidos por el ordenamiento jurídico vigente para la enseñanza y curso a los que se pretenda acceder.
Cuando no existan plazas suficientes en algún centro para atender la demanda existente, el proceso de admisión se regirá como criterios prioritarios por la existencia de hermanos matriculados o padres o tutores legales que trabajen en el centro; la proximidad del domicilio o del lugar de trabajo de alguno de los padres o tutores legales; las rentas anuales de la unidad familiar, atendiendo a las especificidades que para su cálculo se aplican a las familias numerosas; y la concurrencia de discapacidad en el alumno o en alguno de sus padres o hermanos.
Será nulo cualquier compromiso adquirido por un centro que implique la reserva de un puesto escolar sostenido con fondos públicos fuera de los procedimientos oficiales.
Madrid elimina las zonas de escolarización
Habitualmente controvertido, el proceso de matriculación de alumnos en Ceuta, donde ciertos colegios concertados registran una demanda extraordinaria, sigue condicionado por la delimitación de unas áreas de influencia que la Comunidad de Madrid ha eliminado. Entre los criterios de admisión en centros educativos de la Comunidad de Madrid para el curso 2013 / 2014 destaca la eliminación de las zonas de escolarización. Quedará una zona única en la que los padres tendrán mayor libertad para escoger el colegio en el que quieren que estudien sus hijos. El nuevo baremo de admisión permite a los centros dar un punto a su antojo a los candidatos.