Al abogado y asesor fiscal Santiago García Caballero le correspondió cerrar, con una ponencia titulada ‘Consideraciones acerca del nuevo impuesto sobre el Patrimonio y otras medidas fiscales’, el programa vespertino de la primera sesión de las jornadas. El granadino dirigió su exposición a los estudiantes presentes en la Sala de Juntas de la Facultad, ante quienes desgranó este tributo como un instrumento “sin ninguna importancia sobre las arcas públicas” que se ha recuperado “transitoriamente” para “intentar salir de la situación económica en la que estamos”.
“En Ceuta, donde además contempla una exención del 75% y quienes estén obligados a pagar se podrán contar con los dedos de una mano”, destacó gráficamente García Caballero, “su repercusión es aún menor”.
“El Impuesto de Patrimonio no se aplica en ningún país de la Unión Europea”, subrayó el abogado, que se centró en dar cuenta de su propósito y estructura. “Hoy en día, con máquinas que lo hacen prácticamente todo, lo importante es conocer su esencia, qué manejas, por si se recupera en un futuro, no tanto los porcentajes y limitaciones de su aplicación”, apuntó.
El Gobierno español recuperó en 2011 este tributo con la previsión de eliminarlo de nuevo en 2013 con un mínimo exento de 700.000 euros.