El hermano mayor de la Cofradía del Medinaceli, Isidro Cortina, intervino en el programa de Cope Ceuta con posterioridad a la entrevista que concedió el vicario de la Diócesis, Juan José Mateos. Y si el máximo responsable eclesiástico destacó que las obras de reforma de la Casa de Hermandad se habían hecho a escondidas, Cortina negó que en ningún momento las habían efectuado “para forzar a nadie a permitir el traslado de las imágenes”, espetó, para seguir añadiendo que “lo único que queremos es que las imágenes estén custodiadas y que en ningún momento se queden solas y sin seguridad en la barriada del Príncipe Alfonso”.
De entrada, señaló que no quería polemizar con el vicario, “porque nosotros nos debemos a las directrices del Obispado como parte de la Iglesia que somos”. Sostuvo que en la reunión que tuvieron con el Obispo y con el Vicario, la única intención que tenían era preservar también el derecho de los fieles a poder tener la oportunidad de visitar con un amplio horario a las dos imágenes y “es cierto que se nos dijo que vendrían unos matrimonios, pero nos hemos enterado no muy directamente de todas las gestiones que se estaban haciendo”.
Lamentó profundamente lo que le sucedió a ese feligrés que se personó con un ramo de flores en la Iglesia de San Ildefonso y se encontró con que estaba cerrada la Casa de San Vicente de Paúl y no tuvo ninguna oportunidad de depositarlas ante el Cristo de Medinaceli, “porque lo que queremos en el fondo es que el pueblo de Ceuta pueda ver a su Cristo”. Se refería a quien escribió una carta al director, publicada por El Faro, en la que plasmaba su pesar por lo ocurrido y que ha llevado a que este periódico se preocupara por este asunto que cala tanto en el sentimiento caballa.
Sí reconoció, al igual que el propio vicario Juan José Mateos, que en los últimos meses había faltado diálogo entre las dos partes.
Hay que recordar que Isidro Cortina es el máximo responsable de la Cofradía desde el pasado diez de junio y que cuando se mantuvo la entrevista con el Obispo aún no era el hermano mayor, pero formaba parte del equipo directivo y estuvo presente en el cónclave. Aún así tiene el mismo pensamiento que su antecesor en el cargo. En definitiva, vino a redundar de nuevo que todo lo que les mueve es que los ceutíes en general y los fieles del Cristo de Medinaceli en particular puedan tener la oportunidad de venerar la imagen.