Efectivos ceutíes y del Ejército del Aire se adiestraron ayer con reactores de entrenamiento
A falta de helicópteros que una la ciudad con Algeciras, o Málaga, aviones militares. De tal manera, en la mañana de ayer, por espacio aproximado de una hora, reactores de entrenamiento Casa C-101 sobrevolaron el cielo de Ceuta para realizar distintas operaciones de adiestramiento.
En concreto, la Comandancia General de Ceuta confirmó para ‘El Faro’ la existencia de estos aviones y señaló que “desde hace una década se viene realizando colaboraciones habituales y periódicas –se llevan a cabo varias veces al año– con el Ejército del Aire para el adiestramiento del Grupo de Artillería Antiaéreo del RAMIX–30” y añadió que este tipo de ejercicios están previstos en el Plan Anual de Preparación (PAP) de la Comandancia General de Ceuta.
Gris con partes rojas, los aviones que volaron ayer Ceuta, y que por el hecho de que el cielo estaba ayer muy limpio, fueron fácilmente reconocibles por distintos vecinos, no se desplazarán, como hace hincapié las fuentes oficiales consultadas, a lugares bélicos, ni este objeto es su concepción.
Estas operaciones aéreas de adiestramiento se llevan a cabo bajo las órdenes y dirección, además del mencionado Ejército del Aire, por el Grupo de Artillería Antiaéreo del RAMIX–30, unidad que cumple, asimismo, con las siguientes características generales del cuerpo, como destaca Defensa: “Es una unidad moderna, con personal altamente dedicado y especializado, que persigue un programa de instrucción y adiestramiento exigente, realizando actividades y ejercicios tanto en Ceuta como en diferentes campos de maniobras de la península península. Se mantiene en estrecho contacto con otras unidades del Arma y centros de enseñanza para avanzar y depurar técnicas y procedimientos. Su identidad, personal y material es bien conocido en la unidad, con la que colabora en diversas actividades, estando plenamente integrado en ella”.
Construcción española
Por último, cabe señalar que los aviones Casa C-101, reactores de entrenamiento, son de fabricación española, contando asimismo con materiales y tecnología depurada en nuestro país.
“El C-101”, destaca Defensa, “es un avión de entrenamiento avanzado que permite una formación aeronáutica completa desde las primeras fases de vuelo hasta la transición a los aviones de combate. Sus buenas características aerodinámicas, fiabilidad, facilidad de manejo, bajo coste de operaciones y completa instrumentación le convierten en un avión muy adecuado para el vuelo de enseñanza y el vuelo acrobático”. “Este avión representa la segunda generación de reactores de entrenamiento básico”, concluye el Ministerio.