Según ha explicado el secretario provincial del SUP, Jesús González Miaja, esta mejoría supone un incremento de la productividad funcional en unos 30 euros mensuales y se hará efectiva en los próximos meses. El Sindicato ha dado a conocer este compromiso después de recibir confirmación del reconocimiento que desde el Ejecutivo se va a hacer de la “especial penosidad de los policías que trabajan en los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla y las circunstancias que sufren desde hace años, en las que padecen agresiones e insultos a diario”.
De todas formas el SUP va a continuar con sus quejas, solicitando por ejemplo la catalogación de los Policías de la Escala Básica de Segunda Categoría que prestan sus servicios en las fronteras de Ceuta y Melilla, la subida de un punto de nivel en el Catálogo policial y un mayor plus retributivo.
La Ejecutiva Nacional del SUP se ha congratulado de los frutos conseguidos reconociendo como “nuestra insistencia, está empezando a dar su fruto”. El acuerdo de incremento de la productividad funcional de quienes trabajan en los puestos fronterizos de ambas ciudades permitirá que los agentes pasen de percibir 87,35 euros a 116,48.
“El SUP sigue trabajando para que los compañeros que trabajan en estas fronteras tan conflictivas y específicas sean recompensados de forma adecuada”, indica en un comunicado el sindicato.
El sindicato recalca el ambiente hostil que sufren los policías nacionales que ha quedado muchas veces reflejado en los medios de comunicación, tras ser incluso víctimas de agresiones que han terminado con sentencias condenatorias en los juzgados. “Los policías españoles han recibido agresiones verbales; materializadas en insultos y descalificaciones graves, así como en ocasiones también de carácter físico que han provocado no pocas lesiones en los policías”, indican.
Estas reivindicaciones tienen su historia, ya que fueron puestas en conocimiento del Partido Popular en 2008, elevándose proposición no de ley al Congreso de los Diputados por la actual vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría, a la que el SUP le ha vuelto a solicitar que retome el trabajo parlamentario iniciado con dicha proposición no de ley, y del que aún no se ha obtenido un resultado positivo.
“El SUP seguirá trabajando para que el logro obtenido sea el inicio de un proceso que lleve a los funcionarios que trabajan en las fronteras de Ceuta y Melilla a la obtención del reconocimiento justo de su difícil trabajo”, apuntan.
Espacio constante en los medios de comunicación
Tanto en Ceuta como en Melilla, la labor prestada por la Policía Nacional en la frontera ha sido objeto de tratamiento en varias noticias. La situación más crítica se produjo hace un par de veranos cuando las mujeres policías de Melilla sufrieron continuos insultos, vejaciones e intentos de agresión, en un momento crítico de las relaciones entre España y Marruecos. A esto se suma las quejas, ya tradicionales, del trabajo desempeñado en los pasos de ambas ciudades por los agentes ante la falta de medios, de efectivos y de infraestructuras básicas para desempeñar adecuadamente su labor.