Una de las apuestas urbanísticas del Gobierno de Vivas para la próxima legislatura será construir un nuevo vial que una la zona de los pisos de la antigua Estación de Ferrocarril con la parte trasera de los establecimientos comerciales de la Avenida Cañonero Dato. Es decir, en otras palabras, eliminar el muro que separa el puerto de este grupo de viviendas y que viene a tener una longitud de un kilómetro aproximadamente.
Estos trabajos forman parte de las prioridades del Gobierno del presidente Vivas para la próxima legislatura, según confiesa la consejera de Fomento, Susana Román, ya que entiende que el auge que, desde el punto de vista comercial, está tomando la primera línea de establecimientos desde la rotonda de Pepe Caballas hasta casi Portuarios supone un nuevo pulmón económico para nuestra ciudad. Y es que el ejecutivo considera que resulta imprescindible, por supuesto, iniciar la desafección de toda esta zona trasera que hoy por hoy está ocupada por algunos establecimientos comerciales, pero, de manera principal, por almacenes algunos de los cuales dejan mucho que desear en cuanto a la estética y cuidado.
Para Román, desde luego, resulta perfectamente compatible y viable el desafectar algunas zonas del puerto con la necesidad que tiene la Autoridad Portuaria de no dejar de ingresar. Según ha podido conocer esta redacción, por el conjunto de actividades que se encuentran en este suelo se ingresa aproximadamente un millón de euros al año.
El Gobierno tiene muy claro que un nuevo vial supondría una nueva conexión de entrada y salida del puerto, además de que en un futuro no habrá más remedio que ir encontrando fórmulas para la potenciación económica de la zona.
Sin embargo, esta disposición que tiene el Gobierno de Juan Vivas no encuentra mucho respaldo en dos determinados sectores: por un lado, los especialistas en seguridad que señalan que el puerto de Ceuta tiene una serie de especificidad y que la construcción de este nuevo vial y la desaparición del muro supondría dejar una puerta abierta a la entrada de personas que no deberían estar normalmente en terrenos portuarios. Y, por otro, vecinos de las mismas viviendas de la antigua Estación de Ferrocarril, quienes entienden que no sería nada bueno, porque rompería la tranquilidad que normalmente disfrutan y con la que han convivido desde que les fueron entregadas estas casas hace unos quince años.
El ejecutivo apoya esta desafectación
La Consejería de Fomento ha llegado a asegura en respuesta a interpelaciones de la coalición Caballas sobre la situación de la iniciativa de desafectación portuaria de la zona aledaña a la avenida Cañonero Dato que el Ejecutivo que preside Juan Vivas “comparte” el objetivo localista de dejar esa parte de la ciudad en manos de la Administración local.
“Es una incoativa compartida pero cuyo impulso corresponde a la Autoridad Portuaria de Ceuta y, en todo caso, a la esfera de la Administración General del Estado”, destaca la consejera de Fomento, Susana Román.
“Siendo una iniciativa compartida”, añade la miembro del Ejecutivo ceutí, “y siendo alentada por el Gobierno, no podemos hacer más que apoyar la iniciativa con entusiasmo, esta y todas las que vengan a fomentar la mejora del Puerto, de la ciudad y, por tanto, de todos los ciudadanos de Ceuta, aunque escape a la esfera de nuestras competencias”.
Además, en todas las ocasiones, en que se ha discutido este asunto en el pleno, desde el Gobierno de Juan Vivas siempre se ha apoyado la desafección de toda la zona portuaria que se encuentra, justo detrás de los almacenes que están en primera línea de la Avenida Cañonero Dato.
La posicion de Caballas sobre la desafección
“El puerto”, para Coalición Caballas “es una zona de gran valor estratégico en orden a la planificación del desarrollo urbano, social y económico y su progresiva vinculación al tejido urbano ha terminado por convertir una parte muy considerable de su recinto en una parte más de la ciudad pero este hecho no ha venido acompañado de la lógica modificación del régimen legal aplicable, por lo que todo cuanto sucede allí es una serie interminable de disfunciones, irregularidades e inseguridad jurídica que perjudica notablemente los intereses generales”. El planteamiento de la coalición pasa porque la avenida Cañonero Dato y su entorno “ya no obedecen a intereses portuarios” y, sin embargo, ese área tiene todas las potencialidades “para convertirse en el nuevo centro comercial de la ciudad, con capacidad para que se levanten en suelo público y a precios asequibles al menos medio millar de viviendas y un gran número de locales y oficinas”.