El estatuto actual de Ceuta “no facilita” su posible entrada en la Unión Aduanera

Las negociaciones con Rabat para un acuerdo de libre comercio “amplio” no afectan a las ciudades autónomas. La Comisión Europea no cree que su incorporación mejoraría la lucha contra el tráfico ilícito de mercancías. Casi tres años después de que el ahora ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, por aquel entonces secretario de Estado para la Unión Europea, acordase con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, meter en la nevera las aspiraciones de Ceuta para entrar en la Unión Europea, las autoridades comunitarias han actualizado su visión sobre la viabilidad de una antigua aspiración de los agentes económicos locales que llegó a ser respaldada por unanimidad por el Pleno.
La postura al respecto del comisario de Migraciones, Asuntos Comunitarios y Ciudadanía, el griego Dimitris Avramopoulos, no invita al optimismo para quienes mantienen la ambición de ver a la ciudad autónoma dentro de la zona única de comercio europea por la que circulan libremente todas las mercancías.
En su respuesta en nombre de la Comisión a una pregunta de la eurodiputada española Beatriz Becerra, el comisario ha dejado claro que “la entrada en la Unión Aduanera no resulta facilitada por el estatuto actual de Ceuta”.
Para justificar tal afirmación, Avramopoulos recuerda que “los controles de fronteras en la de Ceuta se llevan a cabo con arreglo al Código de fronteras de Schengen y se aplican todas las disposiciones dirigidas a proteger las fronteras exteriores de la UE”. Además, también se aplicarán a la ciudad autónoma “las modificaciones propuestas del Código de fronteras Schengen dirigidas a reforzar los controles mediante la consulta de las bases de datos pertinentes en las fronteras exteriores”.
“La situación de Ceuta y Melilla deriva del Acta de Adhesión de España a las Comunidades Europeas y, más concretamente, de su Protocolo, que aborda esta situación especificando las normas aplicables a los movimientos de mercancías desde y hacia estos territorios”, contextualiza Avramopoulos en su contestación, en la que explicita que “aunque el código aduanero no se aplica en Ceuta y Melilla, se llevan a cabo controles sobre los productos originarios de esos territorios o que transiten por ellos”. Tráfico ilícito
“Por consiguiente”, concluye, “la Comisión Europea considera que su inclusión en la Unión Aduanera no cambiaría la incidencia en lucha contra el tráfico ilícito de mercancías”. Becerra interpeló a las autoridades comunitarias alertando de que la actual exclusión de las ciudades españolas norteafricanas de la Unión Aduanera “supone un lastre en la lucha contra el yihadismo y en la gestión de la política migratoria y de asilo común, y que no resulta coherente con la política exterior de la UE”. Además, inquirió por “qué acciones va a adoptar para evitar que el actual estatus de Ceuta siga favoreciendo la actividad de yihadistas y su ingreso a la Unión”.
La eurodiputada también preguntó por “cuál es el papel que está teniendo la situación descrita en el marco del Acuerdo de Asociación UE-Marruecos y en las negociaciones del Acuerdo de libre comercio”.
Según la Comisión, en el comercio regular, de conformidad con el artículo 37 del Protocolo 4 del Acuerdo de Asociación UE-Marruecos, los productos originarios de Marruecos deben disfrutar en la importación en Ceuta y Melilla “del mismo régimen aduanero que el aplicado a los productos originarios del territorio aduanero de la UE en virtud del mencionado Protocolo 2 del Acta de Adhesión”.
Por su parte, Marruecos concede a las importaciones de productos originarios de las ciudades autónomas “el mismo trato concedido a los productos importados y originarios de la UE”. Para la Comisión “las autoridades aduaneras españolas son responsables de la aplicación del Protocolo 4 en Ceuta y Melilla” pero en cualquier caso “las negociaciones para un acuerdo de libre comercio de alcance amplio y profundo no se refieren a este aspecto de las relaciones comerciales preferenciales entre las partes interesadas”. LAS CLAVES Tráficos ilícitos
En la Unión Aduanera, ni mejor ni peor
A juicio de Avramopoulos, aunque el código aduanero no se aplica en Ceuta y Melilla, s´´i “se llevan a cabo controles sobre los productos originarios de esos territorios o que transiten por ellos”. Por consiguiente, la Comisión considera que su inclusión en la Unión Aduanera “no cambiaría la incidencia en lucha contra el tráfico ilícito de mercancías”. Negociaciones
Al margen de los tratos con el Reino alauita
Las negociaciones con Marruecos para establecer un acuerdo de libre comercio “de alcance amplio y profundo” entre el Reino alauita y la Unión Europea “no se refieren” a este aspecto de las relaciones comerciales preferenciales entre las partes interesadas en lo tocante a las ciudades autónomas. Schengen
Cada vez más control en fronteras exteriores
El comisario ha subrayado que los controles de fronteras en Ceuta se llevan a cabo con arreglo al Código de fronteras de Schengen con todas las disposiciones dirigidas a proteger las fronteras exteriores de la UE. También se aplicará aquí el refuerzo mediante la consulta de las “bases de datos pertinentes”. La petición de acceso, a la espera de “el momento oportuno” El entonces secretario de Estado para la UE, Íñigo Méndez de Vigo, instó, con el beneplácito de Vivas, en noviembre de 2013 a Ceuta a posponer su interés por pedir la entrada en la Unión Aduanera. "Es necesario analizar muy bien los pros y los contras y recordar que el cambio de estatus exige unanimidad en el Consejo, por lo que he recomendado", señaló el alto cargo, ahora ministro de Educación, partidario de "una reflexión más profunda sobre si es el momento procesal oportuno". "Hasta que no se serenen las aguas y se vea sin ningún género de dudas que estamos en una senda de consolidación fiscal y de equilibrio presupuestario, hasta que no desaparezca el mar de fondo, no es aconsejable presentar planteamientos de renovación de especificidades”, avisó. La apuesta de las Cortes y el Pleno data de 2011 El Pleno de la Asamblea acordó en diciembre de 2011 efectuar por unanimidad un “pronunciamiento favorable” de la Asamblea para la integración de Ceuta en la Unión Aduanera Europea “de conformidad con los términos al respecto expresados en las conclusiones de la Comisión Mixta Congreso-Senado”. Dicho órgano había concluido tres meses antes que convenía requerir de la Unión Europea “un tratamiento especial para las dos ciudades” que contuviese, al menos, varias actuaciones como “la solicitud de integración en la Unión Aduanera que sea compatible con el Régimen Económico y Fiscal (REF) y no perjudique las actividades económicas actuales en Ceuta y Melilla”. También se sugería “la apertura de negociaciones para el establecimiento de una aduana comercial convencional en la frontera de Ceuta” y la inclusión de los puertos de ambas ciudades “en los proyectos de interés europeo al objeto de mejorar la accesibilidad y permitir la aplicación de otras políticas comunitarias en materia de transporte marítimo, con las  adaptaciones pertinentes a sus peculiaridades”, así como “el establecimiento de un tratamiento diferenciado en las dotaciones de fondos estructurales y ayudas de Estado”.