Precios más ajustados, incremento de rotaciones, recuperación de la salida de las seis de la mañana o descuentos para determinados grupos como jóvenes, niños o mayores de 60 años.
Estos son algunos de los beneficios que se incorporarán al pliego de condiciones del nuevo contrato de la línea de interés público que entrará en vigor el próximo octubre. Beneficios que fueron detallados, ayer, por la directora general de Marina Mercante, Isabel Durántez, en el transcurso de una rueda de prensa en la que se dieron a conocer los mínimos que debe cumplir la naviera que sea adjudicataria del contrato. Un detalle que Durántez quiso dejar claro ya que sobre lo anunciado puede haber mejoras que la propia naviera aporte.
Estas mejoras son el resultado del grupo de trabajo que se creó hace un año y que se aplicarán en la línea del Estrecho a través de dos contratos distintos, uno para Ceuta y otro para Melilla. Eso permitirá que dentro de un par de años (culminado el periodo de vigencia del contrato) puedan introducirse novedades diferenciadas para cada uno de los servicios.
Durántez detalló que, como mínimo, la naviera que explote este contrato (que ahora está adjudicado a Acciona) tendrá que ofertar 11.200 plazas al día, asegurando un mayor número de rotaciones que pasan de dos o tres hasta siete o nueve. En temporada alta ese número se incrementa a las 14.400 plazas diarias. Con este volumen la propia Durántez aclaró que se satisfacía la posible demanda existente, garantizándose las salidas que sean necesarias para los ceutíes.
El nuevo contrato incluye además novedades en los horarios de las rotaciones. Se recupera, como principal novedad, la rotación obligada de las seis de la mañana, atendiéndose así a una queja global de varios sectores por los perjuicios que esto generaba en la ciudad al afectar al tráfico de mercancías. La propia directora general destacó que con la recuperación de esta salida se permite una mejor conectividad con los enlaces en la península, habiéndose calibrado, por ejemplo, el enlace con las salidas de los trenes tanto en la salida de Ceuta como en la de Algeciras para los que regresen a la ciudad, fijándose, como ahora, la última salida a las 23.00 horas para que el barco lento duerma en Ceuta. Estos cambios en los horarios obligará a que el Puerto se ponga a funcionar antes.
En lo concerniente al bolsillo también se han incluido novedades. Hay una reducción del 27% en el precio de los billetes de pasajeros y un 15% en el de los vehículos. Hablando en cifras, en una aproximación estimada, el precio del barco de ida costaría, en la mejor de las ofertas, en ferry, alrededor de 12 euros y medio contando ya las tasas. En el caso de los no residentes el precio mejor sería, de ida y vuelta, alrededor de 35 euros. Este es el mejor precio que puede costar el trayecto, otra cosa es que la naviera adjudicataria del concurso los rebaje aún más. A este respecto se han abierto descuentos para grupos de población concretos, como es el caso de menores de 12 años, mayores de 60 o familias numerosas. Para Durántez estos descuentos se han basado en un “impacto social”.
La rebaja del 27% en las tarifas se ha obtenido de la comparativa con los precios acordados en el anterior concurso de la línea de interés público, no con los precios que se dan en la competencia actual. Con esta fijación de precios Marina Mercante espera que se incremente la competencia, es decir, que el resto de navieras que no resulten adjudicatarias del contrato luchen, dentro de sus posibilidades de mercado, por ofrecer precios más rebajados. Asimismo, en la lucha por llevarse el concurso, las navieras que opten al mismo pueden ofertar otros precios que rebajen los señalados en el contrato. Estas tarifas estarán vigentes los 365 días del año por lo que se imposibilita a las compañías a alterar los precios de acuerdo a intereses o temporadas.
Los criterios que se tendrán en cuenta a la hora de adjudicar el contrato se ciñen al precio ofertado, puntuando, por ejemplo, la reducción que aporten sobre las tarifas máximas que se proponen. Así también se tendrá en cuenta la mejora que ofrezca la compañía sobre la calidad del servicio que se exige, tomándose como referencia la antigüedad del buque, la asistencia a los pasajeros -en relación al trato que se le dispense- o la mejora en el número de plazas ofertadas y rotaciones adicionales. La directora general de Marina Mercante insistió en que la naviera adjudicataria de este contrato debe tener la solvencia suficiente como para garantizar una “certeza y seguridad” de las salidas y del coste. Insistió además en que sólo después de que se adjudique el contrato se sabrá cómo quedan las precios, ya que las navieras deberán reaccionar ante la lista de precios máximos que puede alcanzar la adjudicataria del contrato para rebajar sus propios billetes abriéndose así un amplio mercado de competencia.
La batalla de precios ha comenzado
A la directora general de Marina Mercante le costaba ayer hablar de precios. Y no es porque no quería hacerlo, sino porque, ahora, debatir sobre este asunto no es dar una información exacta. A saber: en las condiciones incluidas en el contrato que se adjudicará en octubre se fija una tabla con una serie de precios máximos, bien para turista bien para residente. Las navieras que opten a este contrato deberán ahora preparar sus ofertas para competir y llevarse el contrato. Es de lógica que llegado el momento en que cada una presente sus ofertas, habrá una lucha por la bajada de precios. Así que en la adjudicación final se otorgará el contrato a la naviera que haya presentado, entre otros asuntos, mejores ofertas. El precio final se sabrá en octubre.
Delegación y Ciudad resaltan los frutos del entendimiento político
No una, ni dos, sino hasta en más de cinco ocasiones, tanto el delegado del Gobierno como el presidente de la Ciudad y la directora general de Marina Mercante hicieron alusión a las buenas relaciones existentes entre las administraciones. Unas buenas relaciones que han significado que pueda haber un compromiso en firme para intentar alcanzar una reducción en el precio del billete además de un incremento en las rotaciones de los barcos. El propio delegado, José Fernández Chacón, insistió en el clima de diálogo entre las partes que ha posibilitado que se haya avanzado en un ámbito complejo como es el del transporte marítimo. Por su parte Juan Vivas agradeció “la disposición” que ha tenido el Gobierno para permitir que la Ciudad participara en todo momento en este grupo, mentando, de nuevo, “la lealtad y la responsabilidad” como claves. “Hay un antes y un después” de este grupo de trabajo, recordó Vivas. En esa misma línea de cordialidad y unidad se posicionó Isabel Durántez, directora general de Marina Mercante, quien recordó la encomienda del ministro José Blanco por conseguir buenos resultados.
Diez claves para entender los cambios
1 ¿Cuál es la oferta mínima de viajes?
La naviera debe mejorar la oferta actual que se reduce a dos viajes en temporada baja y tres en alta. Pues bien, según el nuevo contrato, en temporada baja se tendrán que ofertar 800 plazas de pasajeros y 150 vehículos para los fast-ferry (es decir cuatro viajes diarios) y la misma cantidad para los ferrys (tres viajes diarios). En temporada alta se obliga a realizar cinco viajes diarios a fast ferry y cuatro a ferry.
2 ¿Horarios y cambios?
Los hay. Como principal novedad es que vuelve el barco de las seis de la mañana y hay más rotaciones.
3 ¿Qué grupos tienen reducciones?
Los menores de 12 años tendrán un descuento en el billete del 50%. También lo tendrán los jóvenes de hasta 30 años que presenten el carné joven, con un descuento del 20% y los mayores de 60 años, que obtendrán ese mismo descuento, al igual, también, que las familias numerosas. En global Marina Mercante anuncia una rebaja media del 27.12% en las tarifas de los pasajeros y un 14.93 en el caso de los vehículos. Durántez aclaró que en la tabla de precios que se ofertarán habrá una pelea de tarifas ya que las compañías pueden, en su disputa por el contrato, ofrecer otras bajas.
4 ¿Puede la naviera alterar los precios?
No. Esto es un asunto que ha dejado claro en el contrato Marina Mercante. Las tarifas señaladas deberán cumplirse a rajatabla por parte de la compañía que se lleve el contrato de tal manera que durante los 365 días del año se mantendrán los precios sin que, porque sea temporada alta, haya una modificación. Con esta medida se intenta cortar la posible intención de variar los precios buscando una concertación en las tarifas como así ha sucedido con anterioridad lo que ha llevado a aplicar sanciones por parte del Tribunal de Defensa de la Competencia.
5 ¿Cuándo entran en vigor los cambios?
A partir del 1 de octubre, que es cuando se aplica el nuevo contrato, distinto para Ceuta y Melilla. En estos momentos la línea de interés público la explota Acciona en ambas ciudades hermanas. El cambio se produce a partir del 1 de octubre separando los servicios. El hecho de que el contrato sólo dure dos años se hace para tener un mayor control sobre el cumplimiento del mismo. Es una forma también de que poder introducir cambios y mejoras que hayan surgido durante todo este periodo. Como es más corto el periodo de vigencia esos cambios se introducirían antes.
6 ¿Cabe la posibilidad de cambios?
En cuanto al precio no, y eso es algo que dejó bien claro la directora general de Marina Mercante. Durante los 365 días del año la compañía deberá respetar los precios estipulados. Esto frena cualquier tipo de especulación, y cualquier intento de la naviera por cambiar los precios según la temporada en que se esté. De esta manera el usuario sabe qué precios máximos va a tener y qué viajes les resulta más rentables sin que la naviera, por sorpresa, se los pueda cambiar. Esto es algo que se mirará con lupa.
7Criterios de adjudicación
En el nuevo contrato se va a valorar el precio, la reducción sobre las tarifas propuestas o la capacidad de solidez que tenga la compañía. Así también se le exige que disponga de unos barcos específicos, con capacidad y prestancia para cumplir con el servicio. Se analiza por ejemplo la antigüedad del buque o la atención a los pasajeros.
8¿Y los minusválidos?
La accesibilidad también es una nota a tener en cuenta, ya que en la oferta que hagan las compañías deben dejar clara esta atención.
9 ¿Puede ser más barato?
Claro que sí. Marina Mercante no quiso hablar mucho de precios, ya que estos pueden variar. Se ha fijado unos máximos y las navieras ahora deben hacer sus ofertas con lo que en la pelea abierta seguro que irán a la baja.
10¿Y en temporal?
Se deben garantizar unas rotaciones mínimas exigidas y, como sucede ahora, se obliga a que el barco duerma en Ceuta. Se atienden también en las conexiones los enlaces que puedan llevarse a cabo. En temporal se garantiza que la gente pueda salir de Ceuta y que de Algeciras a las 8 como muy tarde.