El diálogo es el nervio central del sistema nervioso que hoy día impregna la política nacional. No hay político que se precie que en cuanto tiene la posibilidad de hablar en una emisora de radio o televisión o bien a preguntas de cualquier periodista, enseguida diga, en relación con Cataluña, la consabida tontería de que hay que dialogar. Nunca dirá sobre qué, pero ellos consideran que de esta manera han hecho un gran favor a la Patria, ya que gracias al diálogo, han evitado nada menos que la guerra. Y así, ¡Uf, cualquiera no dialoga! Por el diálogo, cambian las palabras de lo que otro dijo, e interpretan en sentido contrario el parecer del otro. Así, el diálogo y la confusión, para desembocar en la ambigüedad con objeto de no llamar a las cosas por su nombre está a la orden del día. Porque seguro que ustedes han oído muy claramente que el tal Puigdemont, Puchi para los amigos, uno de ellos Mariano, ha declarado la independencia de la república catalana, y aunque sea una bufonada, ya que por ahora, todo el proceso lo es, el amigo de Mariano y Mariano continúan con la ambigüedad, todo sea por el diálogo. Así, la Declaración Unilateral de Independencia (DUI), es fácil convertirla, en aras del diálogo en el DIU, el Dispositivo Intrauterino (DIU) ya que este no tiene nada de simbólico y sirve para muchas cosas, mientras que la DUI no parece tener utilidad alguna ya que dicen que es simbólica, salvo para demostrar que el Registrador es un gran padre de familia, un estupendo esposo y una calamidad como Jefe del Ejecutivo.
Entre las utilidades del DIU, la principal es la de evitar los embarazos, por lo que de alguna manera se une a la DUI simbólica, ya que es un quiero y no puedo, es decir al ser simbólica parece que no quiere quedarse preñada de la república, que no acabará de nacer, se proclama la república en plan bananero, pero no se la deja actuar , no hay presidente de la república, el Monarca sigue siendo de todos los españoles incluidos los catalanes, la minuta de los dineros para sus catajadas y relaciones exteriores se la pasan al resto de los españoles que la pagan IVA incluido, los independentistas están contentos porque han , finalmente, proclamado la república aunque no sirva para nada y el Registrador no ha debido hacer uso de ninguna fuerza porque ¿cómo se iba a meter con una república de marionetas? No se debe emplear la fuerza ante enemigo tan minúsculo, debió pensar. Pero en serio o en broma, ha habido un golpe de estado.
El DIU debe ser introducido en el útero por un profesional de la salud y permanecer en su interior en tanto no se desee el embarazo, por lo que no sé hasta cuando el caudillo de la Generalidad querrá tener ese dispositivo consigo o bien cuando apelará al consejero de sanidad de su tribu para que cuidadosamente le extraiga tamaño utensilio, naturalmente no del útero ya que, me dicen, carece de él, por lo que habrá que utilizar el sistema tan catalán de los caganer (figura de barro que representa un campesino y ataviada con faja y barretina en ademán de defecar que se sitúa en los lugares más recónditos del Parlamento). Ya se sabe que los “nacionalistas” catalanes son gente práctica y tienen soluciones para todo. Todo ello en el caso en que exista “diálogo”. Todo ese tiempo debe, por orden de su médico, cuidadosamente estar integrado en su organismo. Si el DIU es de cobre, tiene una ventaja sobrevenida: se utiliza como contracepción de emergencia, con lo que si el diálogo es fructífero, la república catalana no se proclamará una vez más y además es realmente eficaz durante 12 años, con lo que la murga que nos espera, a poco que la ambigüedad funcione, puede ser de aurora boreal.
El DIU entonces oirá muchas conversaciones, referentes todas ellas, naturalmente al “diálogo”, ya sea por persona interpuesta, por ejemplo la abogada del estado irresponsable de las cuestiones catalanas, que le dirá al bello Junqueras, “Oye Oriol, pero que bien masajeas mientras yo miro al techo”. Seguro que el DIU se ruborizará.
Otro día el DIU oirá de un tal Millo decirle al ser en el que habita “Oye Puchi, ya he echado una buena filípica a mi Policía para que no se pasen, todo sea por el diálogo”. Pero cuando pondrá todas sus antenas en orden será cuando oiga a su Puigdemont hablar directamente con el habitante de mayor rango de la Moncloa, es decir el ínclito Mariano, cuando oiga que por fin van a dialogar. "Oiga Puigdemont, a ver vamos a dialogar” ¿Y de qué quiere usted que dialoguemos? “Señalará acertadamente el cuarto por Gerona “Pues de que va ser, pues de cómo va su embarazo” “Embarazo, por ahora nada, ya que hay diálogo” “Ah perdón lleva usted toda la razón. Bueno pues, ¿qué le pareció a usted la manifestación del 8 de Octubre en Barcelona?” “¿De qué manifestación me habla usted, yo ese día estaba sacando mi dinero de la Caixa por si las cosas se ponían mal, quiero decir bien?” Pero como se van a poner mal si hay diálogo…””Lleva usted toda la razón, el caso es que he hablado con mi íntimo amigo Sánchez, sobre el 155 que vamos a aplicarle como falle el DIU y nazca la república catalana de nuevo” ”No me venga con esas, ya sabe que si no aplico la DUI” “No por favor, continuemos con nuestro diálogo ya que sabido es que el DIU puede tener una permanencia de entre 3 y 12 años, aunque el modelo de cobre T380A puede durar hasta los catorce años”
En fin, diálogo para besugos pero que está sucediendo en el teatro nacional, donde se ha podido escuchar en la ceremonia después del desfile de las Fuerzas Armadas a jueces, molestos por la presión que están teniendo en aras de no “apretar”, es decir no aplicar la Ley . Todo ello por el temor terrible que tienen el Registrador y su íntimo amigo por unos días, Sánchez, de aplicar debidamente el artículo 155. Aun así, una Juez de la Audiencia Nacional se ha atrevido a acusar del delito de sedición a los presidentes de la Asamblea Nacional Catalana Jordi Sánchez y Jordi Cuixart de Omnium Cultural como instigadores de las revueltas contra la policía el día del referéndum, enviándoles a la cárcel sin fianza y dejando incomprensiblemente al jefe de los Mozos de Escuadra acusado del mismo delito, Señor Trapero sin prisión. Según la Juez, la sedición existía pero estaba juzgando otro momento por lo que la Fiscalía ha solicitado que se juzgue lo actuado también por un momento posterior, a mí sin embargo con una vez me bastaría, claro que yo no estudié la oposición a la judicatura. Todo sea por el diálogo.
Como no podía ser menos, la vicepresidenta dice a Puchi que nunca ha tenido tan fácil evitar aplicarle la Ley, con lo que, como abogada del estado que es, aunque no en ejercicio, está indicando de una manera soez que le está poniendo freno a la acción de la Justicia. Otro DIU, esta vez en el útero y por cierto nada simbólico. Frenemos la ley por el diálogo, no vaya a ser que tengamos que gobernar. Por esto, ya se le han dado a Puchi dos avisos, al primero no contestó y el segundo que debería haber servido para corregir lo dicho en el primero, ha servido para un nuevo aplazamiento, todo sea por el diálogo. El Registrador, muy apesadumbrado, también pidió en el Congreso a su amigo Puchi que no le permita aplicar el artículo. Incluso agradecería que Puigdemont convoque nuevas elecciones, ya que en ese caso el Registrador no aplicaría el 155.
Así, lo que surja de la aplicación del 155, servirá para todo lo que se quiera menos para arreglar el problema catalán. Será un 155 de vuelo corto, ya que ni Rajoy ni el vacío Sánchez tienen ganas de que se aplique. Y ello es incomprensible hasta para los inteligentes de sus partidos, y por supuesto para el resto de ciudadanos.
Mientras, una moción presentada en el Congreso de los Diputados por el partido Ciudadanos contra el abuso intelectual de menores y el adoctrinamiento político en las aulas de Cataluña contó con la negativa del Partido Popular y la del PSOE,” no nos extraña que el nacionalismo haya hecho lo que le ha dado la gana durante treinta años” señaló el líder del partido señor Rivera; mientras los antiguos convergentes, confundían presos políticos con políticos presos, los podemitas siguen en su anarquía, y los socialistas en este capítulo, por boca de su gran timonel catalán, el ínclito bailarín Iceta, se manifiesta en desacuerdo con uno de los pocos jueces que han cumplido con su deber enviando a dos presuntos sediciosos a la cárcel. Todo sea por el diálogo.
¿Es mucho pedir al Jefe del Ejecutivo, que ya que no sirve para gobernar, al menos deje de humillar a los ciudadanos españoles que creemos en la Constitución y en la Ley?