El último acto por el DIFAS, consistente en un izado de bandera y en la apertura de una exposición, atrajo la atención de decenas de ceutíes l Cierra mañana
El Ejército en la calle. O sea, esa unión entre sociedad e institución militar de la que tanto hacen gala autoridades civiles y castrenses de esta ciudad, a veces un tanto por pomposa –aunque hueca– palabrería, fue ayer una nítida realidad.
Porque el Parque Juan Carlos I acogió, por orden cronológico, un izado de bandera con la participación de una Sección de Regulares (GREG-54), la Unidad de Música del Batallón de Cuartel General de la Comgeceu y la Nuba del GREG-54 y la inauguración de una exposición estática y otra dinámica compuesta de objetos, artículos, curiosidades, carros o sistemas puramente castrenses, ambos actos con motivo del Día de las Fuerzas Armadas. Todo ello al aire libre, abierto al público, con un aire de cómplice sintonía entre ciudadanos y Ejército, unión que, también hoy y mañana hasta las 14:00 horas, podrá ser una realidad puesto que la mencionada muestra permanecerá abierta de 11:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00 en el caso de hoy y de 11:00 a dos de la tarde mañana.
Bajo un manto grisáceo y caluroso, las autoridades civiles y castrenses, con Vivas y Espartero a la cabeza por parte de Ciudad y Delegación, y por Sanz Román por la militar, hicieron su entrada en la explanada pocos minutos antes de las 18:00 horas. Desde un lugar habilitado para la ocasión seguirían cómo efectivos castrenses colocaban en el mástil que corona el mencionado espacio una enorme bandera nacional y que acto seguido izarían mientras atronaba el himno. El numeroso público congregado en la Marina, que seguía el desarrollo del acto acodado en la baranda, cerró el momento con una atronadora ovación.
“¿Y aún funciona esto?”, preguntó un joven a un efectivo militar mientras señalaba con la mano un mortero 120. “¿Que si aún funcionan?”, respondió el militar, quien añadió: “Y tanto, hemos estado de adiestramiento en la península y hemos podido comprobar lo bien que va y eso que data de 1978”.
La conversación se producía justo cuando las autoridades hacían un recorrido por la exposición y concluyó con una explicación del militar: “El calibre es de 120; su alcance es de 7.800 metros; el peso en batería, 230 kilos; la cadencia de tiro, 6 disparos por minutos; su método de transporte es por carrillo; el tipo de munición es rompedoras fumígenas, iluminantes, de ejercicio y portadoras de submuniciones; y su radio de acción de la granada, de 150 metros”, concluyó. “Muchas gracias”, respondió a su vez el ciudadano ante tal demostración de saber castrense.
Respecto a la muestra, desde la Comandancia se explicó que “consiste en una exposición de los materiales, vehículos y armamento más significativos de las unidades de la Comgeceu, añadiendo algunas exhibiciones de Bandas de guerra y escuadras de Gastadores, exhibiciones caninas y desactivación de minas y explosivos, amén de otras actividades de entretenimiento para los más pequeños”.
En ese momento, una exhibición de Regulares y otra canina acto seguido, que terminó con una de especialistas en explosivos de Ingenieros, atrajo la mirada y atención de los presentes. Como, a buen seguro ocurrirá hoy con el programa que se espera: exhibiciones caninas, de desactivación de explosivos o de la banda de Guerra y Gastadores de la Legión. Mañana los actos serán a las 11.15 horas con una muestra canina.
Será entonces cuando el Día de las Fuerzas Armadas 2015 habrá concluido definitivamente tras una serie de actos variados que, con más intensidad que en años anteriores, fue seguido por muchos ceutíes, evidenciándose así esa ínclita unión entre Ejército y sociedad.
Sanz Román es ya un general en la reserva, tras pasar a este estado a las 00:00 horas
Ahora ya sí. Es decir, en el momento en que usted, lector, lee estas líneas, Sanz Román será ya un militar en la reserva y, por ende, la Comandancia General de Ceuta, aguardará ya la llegada de su sucesor que, como adelanta ‘El Faro’ en esta edición será, con casi toda probabilidad el general Sancho Sifre. Vivió, por tanto, el general Sanz Román su última jornada al frente de la Comgeceu, tras dos años y cuatro meses, y lo hizo con evidente emoción. Acompañado de ‘sus’ militares y su esposa, el general se erigió en el cicerone perfecto para mostrar la exposición a las autoridades civiles presentes.
“Deseo que las estrechas relaciones con la guarnición militar se mantengan y se hagan cada vez más fuertes por el bien de Ceuta y del pueblo caballa. Mi voy con tristeza, con mucha tristeza, pero con la satisfacción del deber cumplido con la Comandancia”, dijo el día anterior en el Ayuntamiento. Jornadas, pues, que no olvidará a buen seguro.