Abandonada desde su rehabilitación, objeto de intentos de entrada constantes, tapiada de igual forma para evitarlo... la Sirena de Punta Almina ha vuelto a sufrir daños e intentos de ocupación por individuos que o bien solo quieren causar destrozos o buscaban adentrarse. A pesar de que se cerraron todos los huecos posibles con ladrillos y cemento, los intrusos vuelven a hacer de las suyas apropiándose del estado de una infraestructura a la que no se ha dado uso y cuya titularidad sigue siendo del Ministerio de Defensa. 1,2 millones de euros fueron invertidos en el año 2012 para su reforma, culminada gracias a los fondos librados en su día por el Servicio Público de Empleo Estatal y que se tradujeron en dos talleres de empleo que coordinó la Fundación Forja XXI. El edificio de Punta Almina, remodelado siguiendo el diseño del arquitecto José Montes, fue entregado a la Comandancia General de Ceuta, pero desde ese año sigue sin uso.
El deterioro y los daños son visibles tras su abandono después de que el edificio fuese rehabilitado.
El acceso a la Sirena está además prohibido pero eso no evita no ya que se causen estos daños sino que, también, acudan conductores con sus vehículos para saquearla, como así ha ocurrido. En esta ocasión, según han denunciado ciudadanos a este periódico, se ha producido un intento de entrada causando daños en el exterior, pero no se ha detectado la presencia de okupas. Lo que ha ocurrido es un síntoma más del estado en que se encuentra el Patrimonio de Ceuta en algunos puntos de la ciudad, con bienes que no están lo suficientemente protegidos y cuyas consecuencias se visibilizan en este tipo de imágenes.