Dos jóvenes caballas al asalto de Primera División

La próxima temporada en Primera División de fútbol-sala habrá un hecho destacado y es que dos jugadores ceutíes militarán en la categoría.

–¿Cómo valorais el año?
D.C.: En la 1ª vuelta me creía que iba a llegar a un equipo más competitivo pero me dí cuenta de que no lo era. Además, había problemas económicos y yo venía de pasar un año muy complicado en Guadalajara donde no pensaba en el fútbol-sala, por lo que decidí dejar Ibiza y marcharme a casa hasta invierno. Tuve ofertas de División de Honor en Puertollano, pero opté por Gáldar quizás por intuición de que el equipo iba a estar arriba e iba a ascender. Ha sido un año positivo allí y, finalmente hemos ascendido.
H.M.: Muy bien. Individualmente, ha sido un año muy positivo porque además de aprender mucho, he jugado mucho y en partidos muy importantes como la final y semifinal de Copa, play-offs también. Con todo ésto he podido adquirir mucha experiencia para el futuro. Colectivamente, hemos dado la cara pese a la juventud del equipo. En la selección sub’21 ya pasé la edad, ahora quiero llegar a la absoluta pero ya sé lo complicado que será estar ahí.
-¿Cómo viven Gáldar y Santiago el fútbol-sala?
D.C.: El Gáldar es un equipo siempre de play-off y la afición estaba un poco cansada de que todos los años fuese lo mismo, un poco parecido como en Ceuta con la ‘ADC’. Sin embargo, he alucinado como en los momentos importantes la afición se volcó. Se notaba que querían un equipo en Primera y nos hemos visto muy arropados en los momentos clave. Estoy seguro de que van a disfrutar en Primera.
H.M.: Lobelle está considerado un club grande y su afición no es para menos. Yo he visto pocas como las de Santiago. Es normal que no siempre se llene el pabellón por lo complicado de la crisis, pero a la afición le doy un 10. Cuando más me sorprendió fue en la final de Copa que nos sentimos muy arropados.
–¿Qué os parece el descenso de la UA Ceutí?
D.C.: Es un paso atrás, después de la temporada que han hecho y la progresión que tenían durante las últimas temporadas. La afición se había enganchado al fútbol-sala, el pabellón se estaba llenando y el equipo se ha metido en play-off con muchos jugadores de Ceuta. Después de el trabajo realizado durante muchos años, el fútbol-sala en Ceuta iba a más. Pero se ha dado un paso atrás en por motivos económicos y es una aunténtica pena.
H.M.: Pienso igual que mi amigo Dani. Como dijo él, es un paso atrás porque el equipo estaba repleto de jugadores ceutíes e hicieron muy buen año, se asentaron en la categoría y todos pensábamos que ese asentamiento sería para muchos años por el buen papel que realizaban. Esto era bueno para las categorías base porque tenían una referencia en Segunda División, que es una categoría muy buena para aprender. También lo siento por la afición, porque había mucha gente en el Pabellón, así que la situación es una desgracia pero tengo confianza en que en el futuro puedan volver a Segunda División.
–¿Qué jugador ceutí escogeríais para llevaros a vuestro equipo?
D.C.: Yo siempre he tenido devoción con Salvi, porque es un jugador que siempre ha demostrado  que, pese a las lesiones sufridas, es un goleador y un futbolista muy completo. Es un jugador que siempre tendría en mi equipo porque siempre da la cara, es un pulmón y, además, tiene mucho gol.
H.M.: Tengo a dos en mente. Uno es Chito porque siempre ha jugado conmigo y otro es Tuli porque los dos son chavales jóvenes, quieren aprender y, pienso que les gustaría salir de Ceuta para continuar con su progresión ya que para mí tienen una gran proyección y que si trabajan duro podrían llegar muy alto.
–¿Qué pensáis del nivel de los jugadores ceutíes? ¿Es suficiente para competir en Primera o Segunda División?
D.C.: Yo pienso que sí, pero hay que tener una realidad muy presente y es que en cualquier equipo profesional te exigen resultados y llegar aprendidos por lo que muchas veces el camino es muy duro.
–¿Por qué os decidisteis por fútbol-sala y no por el fútbol?
D.C.: Está claro que cuando eres un niño, ves el Real Madrid o el Barça y todo el mundo quiere llegar a un grande.  Pero en mi caso, yo desde pequeño me tiraba el fútbol-sala, veía partidos por la televisión de División de Honor y le hacía mucho seguimiento a este deporte. Siempre me gustó, aunque combinaba ambos deportes como se hace aquí en Ceuta, deseaba que llegara el domingo para ir al ‘Díaz-Flor’ o ‘La Libertad’ a jugar el partido de fútbol-sala.Mis cualidades también eran más de portero de fútbol-sala, siempre se me dio mejor y, aunque cuando fui cadete jugué con el Liga Nacional de fútbol once, ya en juvenil me decidí por jugar exclusivamente a fútbol-sala. Ahí es donde me siento más importante porque hago más paradas, puedo dar una asistencia de gol, y me divierto mucho más que en fútbol donde me llegaban muy pocas veces en un partido y casi no tenía protagonismo.  
H.M.: Desde pequeño siempre soñaba con jugar a fútbol, pero una vez que fui creciendo tanto con la selecciones como con mi club disfruté más con el fútbol-sala. Se me daba mejor, era más movilidad, más toque de balón, podía pensar más rápido y ser más explosivo. Por mis características como jugador, se ve que el fútbol-sala me vino mejor, y ya durante los años me fue gustando más y opté por el fútbol-sala.
–Ambos os marchasteis de Ceuta muy jóvenes, ¿se lo recomendais a los futbolistas ceutíes vuestra experiencia?
D.C.: Pienso que sí, todo el mundo tenemos que proponernos lo que queramos. Si de verdad quieres algo, tienes que dejar muchas cosas atrás y yo en mi momento lo hice. Era mi sueño, cerré los ojos y tiré hacia adelante. He tenido en mi trayectoria muchos momentos positivos y muchos negativos pero aconsejo al jugador ceutí que si tienen ganas y mentalidad de que es lo que quieren, que se animen y que prueben.
H.M.: En este momento, tal y  como están las cosas económicamente de mal. Pero yo aconsejo que si hay un buen equipo en el que puedas aprender y que además te proteja en el aspecto económico, está claro que con 18 o 19 años es cuando más vas a aprender y en un futuro si quieres llegar muy lejos en este deporte pues es un buen momento para salir y aprender mucho, pero siempre que lo económico lo tengas asegurado.
–¿Qué echáis más en falta de Ceuta cuando estáis fuera?
D.C.: La familia. Cuando te vas todo el mundo piensa que todo va a ser muy bonito. Pero cuando estás allí, hay momentos muy difíciles en los que echas en falta a tu familia, a tu novia y a tus amigos. El que te den un abrazo cuando estás solo. Además, Ceuta tiene algo especial, el pasear por la calle y que todo el mundo te salude por la calle.
H.M.: Más que nada la familia porque estoy en un sitio muy lejos y es muy difícil llegar hasta allí. En momentos de la fiestas o de reunión, te llaman y te comentan que están todos juntos y eso lo echo muy en falta. También los amigos y sobre todo la ciudad. La gente dice que no, pero se echa mucho en falta. Y sobre todo, también echo muy en falta a mi novia.
–Hasta el momento, ¿Habéis cumplido vuestras espectativas y vuestras ilusiones?
D.C.: Mi experiencia anterior en División de Honor no fue del todo positiva porque firmé por tres años y tuve que irme por problemas económicos. Continué luchando por lo que quería y ahora estoy otra vez en División de Honor.  Ahora quiero asentarme en la categoría cuanto más años posibles sea, llegar a un grande y si pudiera llegar a la selección absoluta eso sería lo más aunque sé que va a estar muy difícil.
H.M.: De momento, claro que sí. De pequeño soñaba con querer jugar en la máxima categoría y ahora lo estoy cumpliendo. Además estoy jugando mucho. Poco a poco quiero seguir trabajando, sueño con ganar títulos y con poder llegar a la selección absoluta y ojalá que sea junto a mi compañero Dani.

DANIEL CABEZÓN AYORA
23 AÑOS · EQUIPO: GÁLDAR GRAN CANARIA · PORTERO · 1,88 METROS · 85 KILOS

Fue el primero en salir de Ceuta hacia Melilla

w El 15 de julio de 1989 nació en Ceuta el que se iba a convertir en uno de los guardametas con más proyección del fútbol-sala ceutí, Dani Cabezón. Mientrás el gran José Ramón, ‘Taconi’, se convertía en todo un referente para el cancerbero ceutí, Dani Cabezón tan sólo podía ir a ver el fútbol-sala al Polideportivo ‘Díaz-Flor’, deporte al que se aficionó desde muy crío como él mismo admite.
No tardaron en darse cuenta de sus habilidades los técnicos, y tras pertenecer a la Unión África Ceutí y pasarse un año al fútbol en Liga Nacional siendo cadete, muy joven, con apenas 16 años en 2005.
Por aquel tiempo, la UA Ceutí FS competía en la Primera Nacional ‘A’, estuvo un tiempo a la sombra de José Ramón. Pero tendría sus oportunidades tras varias lesiones del cancerbero ceutí. Y las solventó con la maestría de un veterano.
Sus actuaciones le valieron para que Sergio Mullor se fijase en él. En 2008 se despedía del conjunto unionista para firmar por el Melilla FS.
Estuvo dos temporadas en Melilla, y consiguió el ascenso la misma temporada que la UA Ceutí como campeón, y jugó la temporada siguiente con los melillenses en División de Plata.
Sus buenas actuaciones le valieron para que el equipo de División de Honor Gestesa Guadalajara se fijase en él.
Fue un año complicado para él en lo económico, y la temporada siguiente se marchó al Gasifred Ibiza. El club no cumplía las espectativas del jugador, que regresó a Ceuta a esperar al mercado invernal. Ahí le esperaba el Gáldar, donde hasta hoy se ha convertido en el meta titular del conjunto grancanario.

HAMZA MAIMON AMESSAUD
21 AÑOS · EQUIPO: LOBELLE SANTIAGO FS · ALA-PÍVOT
· SUBCAMPEÓN ESPAÑA SUB’16 Y SUB’20 ·  3 VECES INTERNACIONAL SUB’21

Del ‘Campoamor’ a convertirse en subcampeón de Copa ante el todopoderoso Barça Alusport
w Muy joven ya Hamza prometía como jugador de fútbol-sala, hasta que se enroló siendo cadete en las filas del San Agustín de fútbol-sala juvenil entrenado por ‘Chito’. Ahí aprovechó para aprender del que fuera jugador de División de Honor.
Siendo juvenil, el entrenador ceutí ya contaba con él para jugar con el equipo de Primera Nacional ‘B’ del Ciudad de Ceuta, disputando la gran mayoría de los minutos.
Aún le quedaba un año como juvenil, y en agosto de 2009 hizo las maletas para marcharse al Melilla en el que jugaba Dani Cabezón.
18 años recién cumplidos, y mucho por aprender. Allí en Melilla, fue subcampeón de España con la selección juvenil y ese campeonato le sirvió para que Lobelle se fijara en él.
En su primera temporada con los gallegos, fue cedido una temporada más a Melilla con el que jugó en División de Plata.
Todo ésto le sirvió para que el seleccionador nacional sub’21 se fijase en él y lo convocara en tres ocasiones.
Su primera temporada en División de Honor también ha sido todo un éxito para él, disputando 16 partidos como titular en los que ha podido anotar 4 goles.
Así, se ha convertido en uno de los futbolistas con más proyección de la Liga Nacional de Fútbol-Sala. Aún le quedan dos años más de contrato con el Lobelle Santiago FS y en esta temporada espera confirmarse como jugador de Primera.