Hace tiempo que las fronteras virtuales de Ceuta decidieron levantarse antes de las físicas. La dejación fue la que ordenó dónde debían colocarse. Y así hubo un momento en el que se decidió instaurar una de ellas en la Almadraba. Ahí mismo. Pasas la iglesia y ya una piensa si sigue en Ceuta o ha cruzado ya la frontera del Tarajal. El caos impera, se desprecia el orden en todos los sentidos, las infraestructuras en las que se supone se ha invertido una millonada según los planes de barriadas que tan bien venden los políticos son fantasmagóricas... el abandono es total. Carreteras destrozadas, incumplimiento de las ordenanzas, una playa convertida en punto negro y desorden, caos, locura. Es una vergüenza que se siga vendiendo y difundiendo la teoría de que Ceuta es única, está mantenida y cuidada en base a criterios de igualdad, está protegida de igual forma porque no es así. Te llaman demagoga si cuestionas algo tan básico como la comparativa entre playas. ¿Ustedes creen que en la Ribera se mantendría la misma desidia que en el Tarajal?, ¿cabría dejar un delfín muerto durante semanas en esa playa?, ¿se pondría remedio inmediato si se dieran las condiciones de insalubridad y contaminación que se están permitiendo?, ¿qué explicación van a dar cuando llegue la temporada de baño y los vecinos de las barriadas próximas quieran acudir a la playa?, ¿les van a dar seguridad en el baño?
Quien habla de la Almadraba a Tarajal puede añadir más abandonos en la lista y colocar tantas fronteras virtuales como crean convenientes. Lo que una no entiende es cómo en una ciudad tan pequeña se permite ese nivel de abandono, se marcan límites, se fuerza la permanencia de ese diferencial. Los años y las mejoras se han quedado bloqueadas en determinados puntos, han decidido no avanzar, han decidido detenerse en el tiempo. Y es una pena, es una auténtica pena que cada vez el círculo se estreche más y los puntos cuidados se vayan reduciendo a zonas con carácter privilegiado mientras el resto se queda perdido en otra época, desfigurándose, perdiendo su esencia, transformándose en barrios y puntos extraños. Una lástima.
Totalmente de acuerdo la frontera comienza en el cruce del almadraba, Ceuta da pena, no hay orden, las obras son interminables, del cruce del almadraba hasta la frontera es tercermundismo puro y duro, estamos a la deriva, nuestros gobernantes y políticos en general viven de espaldas a la realidad, los funcionarios y no funcionarios que cobran de la administración les da igual y el resto que dependemos de la iniciativa privada parece que nos han puesto una vacuna antiprotestas, somos incapaces de luchar y protestar por las injusticias que estamos sometidos. Ceuta está sumergida en el tercer mundo y cada vez estamos masenfangados y con muy pocas probabilidades de salir de esta pesadilla