Ante las continuas noticias de prensa que están saliendo en los medios de comunicación, la dirección del colegio de educación especial San Antonio quiere dejar constancia de una serie de cuestiones.
La falta de recursos ante el inicio del Plan de Empleo es algo que se viene arrastrando desde años anteriores, concretamente desde el curso escolar 2010 – 2011, debido a que no se han cubierto las plazas estructurales del cuerpo de Oficial de Actividades Específicas. Todos los años comenzamos con los mismos problemas, por tanto, la realidad es que no debemos depender de un servicio complementario, pues en el momento que se produce un retraso de los mismos éste afecta a toda la organización del colegio.
El hecho de que no tengamos una persona del cuerpo de Oficial de Actividades Específicas por aula no hace que el alumnado no esté debidamente atendido en sus necesidades básicas como alimentación, control de esfínteres, aseo, cambio de pañal, acompañamiento en el trasporte, vigilancia en el recreo o en las entradas y salidas, sino que hay una evidente sobrecarga de este colectivo que hace que estén saturados. Por ello, y por el eficaz trabajo en equipo que se hace desde el centro, siempre pensando en el beneficio del menor, toda la comunidad educativa del colegio colabora en dichos cuidados.
Estas necesidades han sido trasladadas a la Dirección Provincial cada año, y hay que decir que ante la no proyección en un breve periodo de tiempo del comienzo de dichos Planes, la Administración se ha comprometido a subsanar esta dependencia aumentando, en un plazo de un año a dos, la plantilla del cuerpo de OAES.
En todo momento hemos sido escuchados y atendidos, por lo que no hemos notado por parte de la Administración ningún tipo de abandono ni dejadez, siendo conscientes de que no se puede solucionar en un periodo breve de tiempo algo que tenía que estar resuelto hace años ya, a pesar de que todos los DP lo han planteado y defendido con interés en Madrid.
En este sentido, desde la dirección del colegio entendemos a las familias y apoyamos sus demandas, pero también era importante dar un mensaje de calma, pues estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para no dilatar más en el tiempo esta clara falta de cuidadores.
Por otro lado, creemos que era justo aportar también la parte positiva y analizar todos los avances que estamos teniendo, de cara a proyectar la otra cara de la moneda, pues aunque queda un camino largo que recorrer para estar al cien por cien en inclusión e infraestructuras, sentimos la necesidad de tener que tranquilizar a las familias.
A día de hoy se ha disminuido la ratio por aula, se ha podido aumentar la plantilla de maestro de apoyo , pues tanto el año pasado como en este las vacantes que llegaron de más a Ceuta fueron a parar a San Antonio, algo que demuestra que estamos entre las prioridades del MEFP.
Se ha logrado reconocer por primera vez la figura del técnico de Transición de la Vida Adulta, una figura que marcaba la Ley y que nunca la habíamos tenido en el Claustro. Han dejado de ser escolarizados menores con problemas de comportamiento no asociados a una discapacidad o trastorno, así como aquellos que se encontraban en la etapa de infantil o pasaban a la Secundaria. Se ha puesto sobre la mesa la ampliación del colegio y se ha dotado, por parte también del Ministerio y gracias a las obras que ha hecho el Ayuntamiento, de un aula de Estimulación Basal que estará pronto en funcionamiento.
Asimismo, cada vez son más los centros, las entidades, o el propio ICD, quienes cuentan con nuestro alumnado para hacer actividades conjuntas, gracias a la visualización y la apertura al exterior de nuestro colegio.
También, por primera vez se ha logrado una coordinación con el INGESA, en relación al psiquiatra infantil, a petición del propio especialista y de las familias. Y se ha iniciado un compromiso, en un futuro, y para mejorar la integración de un alumnado que también debe ser escolarizado dentro de su modalidad, las aulas terapéuticas y de salud mental.
En definitiva, desde el colegio tenemos la seguridad de que gracias a la lucha de las familias, del trabajo excepcional de toda la plantilla de San Antonio, y de la concienciación de la Administración, Ceuta va a lograr que la calidad de la educación del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo no quede franqueada y se cumplan todos sus derechos. Y para ello, tenemos que caminar todos y todas en la misma dirección, dejando a un lado las distintas diferencias.