La Dirección Provincial del Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) y, por extensión, la Delegación del Gobierno en Ceuta, se han visto sacudidas durante los últimos siete días por la dimisión del hasta ahora jefe de la Inspección Educativa, Carlos Cornax, que ha formalizado su renuncia al cargo tras la incorporación como interina para la cobertura de una vacante del denominado ‘cupo COVID’ de la esposa del director provincial de Ceuta, Juan Bosco de Alba.
Según las distintas versiones recabadas por este medio en diversas fuentes de la comunidad educativa, la dimisión del jefe de la Inspección se produjo después de que se “quebrasen” todos los criterios seguidos para el reparto y adjudicación en colegios e institutos de esas vacantes en cuanto a número y especialidades.
Si en los centros de Infantil y Primaria se había atendido a su número de líneas para ordenar el refuerzo de recursos humanos y a los institutos se había mandado a tres por centro dando a sus directores la posibilidad, como hicieron, de elegir su especialidad (Lengua, Matemáticas e Inglés como prioridades), al IES Abyla se ha asignado un total de 5,5, dos y media más., “al margen de los criterios técnicos aplicados”.
De acuerdo con la información trasladada a los Servicios Centrales del Ministerio de Educación, el director provincial, con quien este periódico intentó contactar ayer sin éxito, habría requerido expresamente para ese instituto una asignación adicional de una vacante de Servicios a la Comunidad y otra de Intervención Sociocomunitaria, especialidad de cuya lista de interinos se encontraba al frente su esposa, con el argumento de reforzar el ‘equipo COVID’ del IES y a pesar de que en su plantilla no existía ninguna plaza por cubrir con ese perfil ni se trata de profesionales adscritos al Departamento de Orientación, como sí sucede con la primera.
El presidente de la Junta de Personal Docente dice “no tener información”
Al final se asignaron 1,5: media para quien estaba delante de su allegada, que solo tenía 0,5, y una entera para la pareja de De Alba.
A pesar del terremoto generado por la dimisión de Cornax y la polémica generada en el ámbito de los interinos directamente afectados, la Delegación del Gobierno eludió ayer hacer “ningún comentario o valoración” sobre lo sucedido. El presidente de la Junta de Personal Docente No Universitario de Ceuta, Francisco Lobato (FeSP-UGT), confirmó tener conocimiento de la dimisión de Cornax y de la adjudicación de 2,5 vacantes extra al IES Abyla, pero alegó “no tener información” para pronunciarse al respecto.
Fuentes cercanas al director provincial han argumentado que no se ha producido “ninguna irregularidad” y que su esposa “no puede verse perjudicada laboralmente por estar en una lista de aspirantes a ocupar puestos en régimen de interinidad de la que se piden candidatos”. “La irregularidad no es que su esposa trabaje, sino que el director provincial elija sacar la plaza de su especialidad sin abstenerse”, contradicen otras fuentes esa versión.
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