Desde que la Ciudad adoptó la decisión de derribar el mítico polideportivo López Díaz Flor, el proyecto de edificar unas nuevas dependencias deportivas en la zona donde antes se alzaba el antiguo inmueble, ha cuidado al máximo hasta el mínimo detalle.
En este meticuloso trabajo no se ha dejado de lado la elección de los materiales, apostando por la calidad y por unos componentes acordes con las condiciones meteorológicas de la zona en la que se ubica el edificio.
Así, para el revestimiento de la fachada se empleará GRC, un material prefabricado en microhormigón armado con fibra de vidrio, mucho más ligero que el hormigón convencional, lo que lleva a reducir el tiempo de instalación y abaratar los costes, debido a que los anclajes de unión de los entramados son mucho más ligeros. Su escaso peso lo hace idóneo para su empleo en edificios de gran altura.
Su resistencia a condiciones meteorológicas adversas también lo convierte en el material más adecuado para levantar un polideportivo cuya ubicación lo hace más vulnerable ante la humedad y salinidad.
La elección de GRC ha sido determinante al tratarse de un material incorruptible a las condiciones adversas. Además de ofrecer gran resistencia a las fisuras, lo que reduce el mantenimiento del lugar, es un material incombustible, característica que garantiza y aumenta la seguridad de las instalaciones.
La fachada del polideportivo contará con un gran muro cortina de cristal en tono negro, tras el cual se habilitará un gimnasio, y que, si bien no dejará ver lo que ocurre en el interior, sí permitirá a las personas que estén practicando deporte en el polideportivo disfrutar de una imponente vista del exterior.
Otra de las cuestiones que se ha tenido en cuenta a la hora de edificar las nuevas dependencias es la ampliación de la oferta deportiva respecto al anterior inmueble. Aunque en un principio se barajó que el complejo se dedicara exclusivamente a deportes acuáticos, finalmente se optó por abrir el abanico a otras disciplinas, posibilitando así que los usuarios puedan elegir entre una mayor oferta.
Esta propuesta se materializará a través de una pista polideportiva de 968 metros cuadrados que albergará canchas para badminton, baloncesto, voleibol, jockey, balonmano y fútbol sala.
La movilidad de los elementos necesarios para cada uno de estos deportes permitirá habilitar, rápidamente, la pista para la celebración de distintos encuentros deportivos que podrán disfrutarse desde las gradas, cuya capacidad es de 50 personas. Las dos piscinas ofrecerán la posibilidad de realizar distintos tipos de actividades.
La de mayor tamaño, 33x25 metros cuadrados, supera con creces a la del anterior polideportivo cuyas dimensiones eran de 25x12. La pequeña, que presenta unas medidas de 12,5x8 metros cuadrados se plantea como vaso de enseñanza. En esta zonas se ubicarán unas gradas con capacidad para 250 personas.
El complejo, que se edificará sobre 7.115 metros cuadrados, se completará con tres salas para actividades grupales, una de cycling, seis vestuarios (de los cuales tres son de monitores), zona de administración y comunes, así como sala de prensa.
El inmueble es totalmente accesible a personas con movilidad reducida y en el proyecto se sigue manteniendo el número de plazas de aparcamiento ya existentes. La obra, que ejecuta Tragsatec, tiene un plazo de ejecución de 13 meses y su coste es de 7.871.000 euros.
La selección nacional de Marruecos Sub-17 ha conseguido clasificarse para la fase final de la…
La Navidad en Ceuta ya ha arrancado por todo lo alto con el acto oficial…
El Camoens da la cara ante el filial del Melilla Torreblanca, pero no consigue puntuar…
La Unión África Ceutí no levanta cabeza y son cuatro derrotas consecutivas las que acumula…
Ceuta ha recibido con los brazos abiertos la Navidad. Este sábado se ha llevado a…
El Ceuta B encaraba la jornada 12 de la liga ante el líder Puente Genil…