Cuando se pasa el umbral que separa la calle de una librería uno se da cuenta que está entrando en un lugar que es mucho más que una tienda.
Una librería es como un mundo donde perderse, que te permite conocer infinidad de lugares y personajes. Y que tiene vida propia. Al menos así es como lo siente África García, quien regenta la librería África Totem en Ceuta desde 1983. Desde entonces, cada mañana, cuando abre la puerta, saluda a la librería. La madre de África era caballa y conocía mucha gente en la ciudad. Esto la llevó a que cuando terminó la
universidad en Madrid, donde estudió
Historia Contemporánea, volviera a Ceuta. Como no podía quedarse quieta, con tan solo 22 años y sabiendo que ella entendía de libros, decidió abrir su propia librería. De eso hace ya casi 40 años.
África García. Librera. "La lectura nos salva de la soledad y nos ofrece una forma de comunicarnos clara"
Esta fue la primera librería de la ciudad donde “sólo había libros y donde el cliente podía tranquilamente coger uno de la estantería, ojearlo, mirarlo, coger otro libro… Es decir, que el cliente tenía contacto directo con el libro”, expresa África. Quizás el sello más importante que pueda tener hoy día África Tótem es su especialización en bibliografía del norte de África, relaciones España-Marruecos y el antiguo Protectorado Español. Tampoco faltan en sus estanterías los best seller y los últimos descubrimientos ya que África considera que ser librero también conlleva un trabajo de investigación “para conocer nuevos autores, qué comunican por su trayectoria, los temas que trata…” y así tener siempre algo nuevo que ofrecer a los clientes.
Y es que, para ella, “la lectura aporta absolutamente todo. Nos salva de muchas cosas, de la soledad, de un mal estado de ánimo, nos aporta agilidad mental, un vocabulario más extenso, una ortografía mejor, una forma de comunicarnos más clara y concisa y también nos aporta conocimiento y diversión. Todo es positivo”.
José Bentolila. Librero. "El cliente que llega aquí es un cliente fiel"
Recorriendo las calles de Ceuta nos encontramos con Librería Sol, la más antigua de la ciudad. Su historia comienza
en Tetuán, en el Marruecos del Protectorado, en el año 1939, justo después de terminar la Guerra Civil. Tres empresarios se asociaron para abrir este negocio, que al principio era más papelería y estaba orientado al tema de la pintura y las bellas artes. Ahí comenzó trabajando el padre de José Bentolila, dueño actual de la librería. “Después del Protectorado, en 1959, mi padre se traslada a Ceuta y con el mismo nombre abre su propia librería aquí. Al principio estuvo ubicada en calle Real, hasta el año 1984, y debido a una remodelación de la calle y obras en el edificio nos trasladamos a la ubicación actual. Yo empecé en el año 1989, cuando muere mi padre y me hago cargo del negocio”, comenta.
Esta larga historia hace que muchos clientes lo recuerden a él de niño o a su padre y que tenga una clientela que se mantiene con el paso de los años. Así lo asegura también Luis Fernando Domínguez, quien lleva dos años trabajando en esta librería, y afirma que “el cliente que llega aquí es un cliente fiel y siempre nos dice el buen trato que reciben y la disponibilidad que tenemos y está muy agradecido por la trayectoria”.
Ana Sánchez. Librera. "Hay personas que vienen prácticamente cada semana a por un libro"
Librería Sol no está especializada en un ámbito, abarca todo el elenco que una gran librería puede tener y siempre dispone del libro adecuado para las personas que llegan buscando una recomendación. Además, se han dado cuenta de que cada vez hay más lectores y que siguen prefiriendo la versión en papel. Quien si está especializada en un ámbito muy especial es la librería-copistería de Ana Sánchez, que hoy cumple 9 años. Pensó que podía ser buena idea intentar dar una segunda vida a los libros y empezó con “dos estanterías pequeñas con libros procedentes de mis familiares”, revela Ana. A día de hoy, la librería cuenta con una pared entera llena de libros de segunda mano. En ella se pueden encontrar libros de todos los géneros y estilos y aunque pensaba que había libros que no se iban a vender, se venden. Tal y como manifiesta Ana, “esto es una forma de darle una segunda vida a los libros. Hay mucha gente que le da pena tirarlos, por ejemplo cuando tienen que hacer una mudanza. Entonces me los traen aquí y les intentamos dar una segunda vida”. Esta iniciativa ha tenido una gran acogida por personas de todas las edades “que vienen prácticamente todas las semanas a por un libro o que pasan por la puerta y no pueden evitar entrar”, recalca Ana Sánchez. Estos libros tienen un precio de entre 0,50 céntimos y 5 euros, aunque hoy, con motivo del día de las Librerías, todos los ejemplares disponibles tendrán un precio máximo de 1 euro.