A primeras horas de la tarde del miércoles, agentes de la
Policía Nacional que estaban prestando servicio en la
frontera de Ceuta con Marruecos procedieron a la identificación de un hombre de nacionalidad marroquí que se disponía a entrar en España a través del paso habilitado para peatones. Tras varias gestiones de identificación se pudo comprobar que al mismo le figuraban nueve órdenes de búsqueda por varios juzgados de localidades situadas en la Península. Dichas órdenes se hallaban vigentes desde hacía varios años y habían sido dictadas por motivos tales como robo con fuerza, robo con violencia o amenazas. Los agentes procedieron a su detención y a su traslado hasta la Jefatura Superior de Policía donde se realizaron el resto de diligencias, pasando a disposición judicial este mismo jueves. Esta intervención se ha desarrollado en el paso fronterizo que separa la ciudad autónoma de Ceuta con el país soberano de Marruecos.
Repercusiones legales
El robo con violencia o intimidación se describe en el Código Penal como acciones que con ánimo de lucro, se apoderaren de las cosas muebles ajenas empleando fuerza en las cosas para acceder o abandonar el lugar donde éstas se encuentran o violencia o intimidación en las personas, sea al cometer el delito, para proteger la huida, o sobre los que acudiesen en auxilio de la víctima o que le persiguieren. Las personas que cometen, como en este caso, este tipo de delitos se enfrentan a penas de prisión que van de los 2 a los 5 años, sin perjuicio de la que pudiera corresponder a los actos de violencia física que realizase. Al ser un ciudadano de nacionalidad marroquí, las penas de cárcel pueden ser sustituidas por la expulsión a país de origen por un periodo de tiempo concreto que en caso de no acatar, tendrá que cumplir la pena de cárcel en suelo español.