Las fuerzas de seguridad detuvieron este miércoles a otros tres pasajeros de un avión del que huyeron tras forzar su aterrizaje en el aeropuerto español de Palma (Mediterráneo) el pasado 5 de noviembre, en lo que las autoridades consideran una forma de entrada irregular de inmigrantes hasta entonces insólita en el país. La Policía española informó de la detención en la isla de Mallorca, en la que se encuentra Palma, de tres marroquíes que permanecían fugados tras huir del avión. Los detenidos son tres jóvenes y están acusados de un delito de sedición y de una infracción a la Ley de Extranjería española. La Policía y la Guardia Civil españolas detuvieron también a otros dos marroquíes como presuntos autores de un delito de favorecimiento a la inmigración ilegal, que supuestamente habrían ayudado a ocultarse a los tres fugados. Las fuerzas de seguridad españolas han detenido hasta ahora a 19 de los 25 pasajeros que participaron en el incidente, mientras que los otros seis siguen fugados. El avión de Air Arabia volaba de la ciudad marroquí de Casablanca a la turca de Estambul cuando aterrizó de urgencia por una supuesta emergencia médica, que luego se demostró falsa, en Palma, cuyo aeropuerto está autorizado para atender este tipo de situaciones y es uno de los de mayor tráfico en Europa por la afluencia de turistas a la isla. Un grupo de pasajeros agredió a miembros de la tripulación antes de huir a la carrera por la pista y desde entonces fueron arrestados quince de ellos, que fueron enviados a prisión de forma provisional, mientras que de dos de los huidos se sospecha que viajaron en barco a la ciudad española de Barcelona (este). Las autoridades españolas investigan si fue organizada a través de un grupo de Facebook en Marruecos esta forma de entrada irregular hasta entonces insólita en España, donde lo habitual es la llegada de inmigrantes irregulares por mar.