La Benemérita ha explotado la segunda fase de la denominada ‘Operación Girasoles’ con la detención de otras diez personas que se suman a las 30 que fueron detenidas la semana pasada. Entre ellas hay 16 que son de Ceuta y en el grupo se incluye un agente de la Policía Nacional, según los datos que se desprenden de la investigación.
Entre los detenidos hay personas presuntamente implicadas en la compra de títulos náuticos falsificados, con distinto grado.
Así, tal y como ha informado el Instituto Armado, de entre los detenidos hay una persona que figura como el cabecilla de la organización. Según la Guardia Civil sería el tramitador y falsificador de ciertos documentos y la persona que finalmente hace los trámites para obtener legalmente el título que solicitan sus clientes, el PNB (Patrón de Navegación Básica). Se trata del llamado A.F.I de 60 años y residente en Cádiz.
En la pirámide delictiva siguen apareciendo los demás detenidos. Están, primero, los presuntos clientes, es decir, aquellas personas que habrían pagado a la organización para obtener el PNB sin tener que realizar curso alguno, tampoco sin examen obligatorio. Y entre clientes y cabecilla se encontrarían las náuticas y ciertos particulares que son intermediarios y se encargan del aporte de documentos, dinero, etc... Estas personas se lucraban económicamente de la gestión, siendo responsables de entregar y falsificar parte de estos documentos y de entregarlos en el Organismo de Capitanía Marítima para que a las pocas semanas pudiera recibir el PNB (ya totalmente legal) y así poder entregarlo al cliente beneficiado.
Entre los efectos intervenidos se encuentran numerosos documentos falsificados de certificados de competencia de marinero y diplomas de patrón de navegación básica y varias facturas de los pagos de los trámites realizados.
La bautizada como ‘Operación Girasoles’ comenzó en septiembre de 2010 pero es ahora cuando culmina con varios arrestos, partiendo las indagaciones de Ceuta, estando avaladas por el juzgado número 6. La sospecha que da origen a la intervención se produce al detectarse que en los trámites para el canje para la obtención del PER (Patrón Embarcaciones de Recreo) y PNB (Patrón para la Navegación Básica) se estaban presentando documentaciones de capacitación falsificada del certificado del título de marinero profesional.
Los precios máximos de pago podían llegar a los 3.000 ó 3.500 euros, aunque había escalas de pago con distintos precios, hasta los 100, dependiendo de la provincia donde se gestionaba Córdoba, Cádiz, Sevilla o Madrid.
Un examen que nunca se hacía
La Benemérita no descarta que pueda haber más detenciones ya que se sospecha de la existencia de más beneficiarios y colaboradores necesarios que impulsan el delito tras solicitar el PNB. Para la obtención de dicho título es preceptiva una formación y un posterior examen homologado que se tendría que hacer en Madrid o Zaragoza. Pues bien, dichos exámenes nunca se hacían. En las ciudades en las que se han practicado detenciones se ha confirmado la relación entre propietarios y titulares de ciertas náuticas y otros dedicados a la captación de personas, tramitación y puesta a disposición del organismo competente de la documentación de la que posteriormente se obtendría el esperado PNB por cada particular.
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