Buena parte de los detenidos en la operación contra el tráfico de drogas desarrollada en Ceuta y Andalucía por la Policía Nacional han sido puestos a disposición judicial a primera hora de este jueves. Los agentes se han encargado de sacar uno a uno a los presuntos relacionados con esta organización criminal desde los calabozos
de la Jefatura Superior, iniciándose un traslado al Palacio de Justicia junto a detenidos de otras causas distintas.
El Juzgado de Instrucción número 2 es el que lleva este asunto, como parte de una amplia investigación en la que estaba trabajando el Cuerpo Nacional de Policía desde hacía meses, rastreando la ruta de cargas de camiones con dobles fondos, específicamente preparados para la introducción de grandes cantidades de hachís.
En total han sido casi 30 los detenidos, solo una decena ha sido puesto a disposición este jueves en Ceuta, en concreto los que tienen que ver con los principales roles de una organización que conectaba la salida de la mercancía desde Marruecos para su introducción en Europa, teniendo en la ciudad autónoma una de las bases principales para que el negocio pudiera desarrollarse con éxito.
En los registros que se llevaron a cabo en la denominada 'Operación Puntilla' se han incautado de vehículos, entre ellos algunos camiones, además de documentación. La Policía considera que ha logrado la detención de los principales cabecillas, aunque quedan enlaces en Marruecos que abastecían el material. Además han sido arrestados los enlaces que se dedicaban al transporte del hachís.
Un operativo importante y una ruta terrestre que no se agota
Durante varios meses el GRECO coordinó este operativo que se ejecutó en su fase estelar el pasado martes, con la participación de casi 200 agentes y la implicación de las UDYCO de distintos puntos, entre ellos la de Ceuta. Se registraron una vivienda y un garaje en Loma Margarita junto a tres naves en el puerto, que han quedado clausuradas. En la Península hubo más, también en las instalaciones en donde se preparaban de manera específica los dobles fondos, muchos de ellos muy especializados, que servían para ocultar el hachís cargado en Marruecos e introducido bien por el puerto de Ceuta o en Algeciras.
El pasado mes de julio la Policía intervino uno de estos camiones con 500 kilos de hachís que estaría relacionado con esta trama. Pero hay más casos que engarzados forman parte de esta amplia investigación con la que se ha desentramado una red dedicada específicamente al narcotráfico a gran escala. Y es que las rutas terrestres siguen siendo explotadas por los narcos, más allá del movimiento constante de narcolanchas que, en este verano, han sido presionadas muy de cerca por las fuerzas de seguridad del Estado.