Detenido un vecino de Loma Colmenar acusado de radicalizar a jóvenes vulnerables

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• La Comisaría General de Información del CNP contó con apoyo de la Brigada de Ceuta y respaldo de la UPR y la UIP durante la operación desarrollada en las 317 VPO y en el Poblado Legionario

• La mujer del detenido (que ya había sido investigado) fue arrestada también hace un año

Entrada la madrugada, agentes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional ‘reventaban’ una operación enmarcada en la lucha contra el terrorismo. Habían pasado cinco meses de la última, pero acudían a un escenario similar: el comprendido entre el Príncipe y las 317 VPO de Loma Colmenar, las que miran frente a frente el Hospital Universitario. Componentes llegados de Madrid junto con agentes de Información de Ceuta desplegaban la operación contando con la cobertura de la UPR y de la UIP. Durante toda la noche se estuvo trabajando sobre el terreno hasta la salida del detenido de su vivienda, pasadas las 9.00 horas.

Antes la Policía había acudido al Príncipe para la práctica de un registro en el Poblado Legionario. Después todos los componentes se posicionaron en la casa del detenido, contando con la presencia de una comitiva judicial para dejar constancia  de cada uno de los pasos que se daba y el decomiso del material que consideraron relevante para la investigación. Esta persona ya había sido investigada con anterioridad por el CNP y también por la Guardia Civil, pero fue ayer cuando se produjo su detención por parte de funcionarios del primer cuerpo. Hace algo más de un año la propia Policía detuvo a la que ahora es su mujer, permaneciendo varios meses en prisión hasta que luego fue puesta en libertad con cargos. A esta joven se le acusaba de captar a mujeres y su detención se enmarcó en las acciones policiales emprendidas para cortar la marcha de féminas a Siria. Esas captaciones se harían a través de redes sociales. Tras su detención en el Príncipe, se le trasladó a Madrid y quedó en libertad con cargos meses después.

Ahora, el modus operandi de la detención se ha repetido en la figura de quien es su marido y padre de un bebé que nació hace pocos días.

Con la cabeza tapada, enfundando en un chándal, fue sacado esposado por los agentes del CNP, metido en un coche camuflado y trasladado a la base policial. Su salida a Madrid estaba prevista a las 13.00 horas pero no fue hasta las 16.00 cuando partieron los pilotos del Cuerpo con el material requisado para su análisis antes de su puesta a disposición judicial.

Las reacciones a la detención de este vecino de la nueva promoción no se hicieron esperar, al menos en redes sociales. Quienes dicen ser familiares, vecinos o amigos directos del detenido denuncian que nada tiene que ver con estas prácticas y advierten de que se trata de un error policial. Pero la Policía piensa todo lo contrario. Lo consideran de hecho “pieza esencial” en el “aparato de captación y adoctrinamiento de Daesh”, expuso el Ministerio de Interior en una nota oficial.

En su detención, el CNP contó con la colaboración del CNI y en sus valoraciones concluyen que el arrestado formaba parte, presuntamente, de una red terrorista establecida en el Príncipe que se dedicaba a captar a personas vulnerables para adoctrinarlas. La Policía entiende que tenía relación con la red desarticulada en noviembre de 2016, cuando se llevaron a 4 personas del Príncipe, de Loma Colmenar y de Cortijo Moreno.

Mientras la operación se desarrollaba en Ceuta, se practicaba otra detención en la localidad alicantina de Teulada y tres días antes, el domingo, Marruecos había realizado otra operación en Tetuán deteniéndose a tres supuestos seguidores del Estado Islámico.

Dice Interior que el detenido formaba parte de una presunta red salafista-yihadista, la misma que desmantelaron en noviembre pero que permanecería operativa en algunas de sus ramificaciones. “Captaba jóvenes vulnerables con el fin de lograr su radicalización”, expone en el comunicado oficial difundido a los medios. “Adoptaba una estética fundamentalista en su aspecto físico y para sus labores de captación reproducía de manera reiterada material del DAESH, mostrando imágenes de ataques terroristas o la ejecución de acciones de martirio junto a su recompensa en el paraíso”, añade. Todo ello, presuntamente, a través de redes sociales. Considera la Policía que ese tipo de prácticas se las había enseñado su mujer. Una joven de la que su propia madre, cuando fue detenida, dijo que era una chica normal y no una terrorista.

“Gestionaba un perfil en las redes sociales, con claras evidencias de su adhesión a DAESH, desde el cual enseñaba pautas a otros jóvenes para visionar publicaciones yihadistas sin ser detectados. Muchas de esas pautas de seguridad le eran proporcionadas por su propia mujer, entre las que destacaban la eliminación del contenido ya visualizado”, explica Interior. “Además, había declarado a su círculo más cercano su intención de trasladarse a zona de conflicto para combatir como muyahidín, manifestando que se marcharía a vivir a Marruecos o Bélgica para no despertar sospechas en caso de marcharse de forma inesperada”. “Para evitar ser detectado y detenido adoptaba medidas de seguridad peculiares, entre ellas, realizar las labores de adoctrinamiento en el interior de su vehículo, por considerarlo un entorno seguro y clandestino”.

La operación causó expectación por el lugar en que se llevaba a cabo y el momento. La Policía había estado trabajando durante toda la madrugada, solo ‘acompañada’ por algún individuo que pasaba por allí o algún trabajador madrugador. Pero las horas iban pasando y el desarrollo del operativo continuaba. A las 6.30 horas el Ministerio de Interior difundía en sus redes sociales el desarrollo de esta operación así que ya cobraba su espacio mediático en El Faro, que solo se hizo eco de la misma en el momento en que Interior valoró que no se corría riesgo alguno en darla a conocer.

Pasaban las horas y amanecía, salían los padres con sus hijos directos al colegio, los trabajadores, transportistas... el ir y venir de una ciudad que se topaba con la presencia de gran cantidad de agentes encapuchados en una de las 317 VPO. Al estar situada justo frente al Hospital, el ir y venir de ciudadanos convertía los exteriores de estos bloques en una especie de mirador.  A las 9.00 horas, tras los relevos de los distintos policías participantes en el operativo preparado desde la tarde del día anterior, se procedía a la fase estelar del mismo con la recogida de todo el material intervenido, la salida de la comitiva judicial y el corte de la carretera para poder sacar sin problemas al detenido, encapuchado, para preservar su identidad haciendo prevalecer la presunción de inocencia y el derecho a la intimidad que en otras ocasiones se ha burlado a pesar de que las fuerzas de seguridad hayan puesto su empeño en que se respetara. Habían estado presentes también los TEDAX ante la necesaria comprobación en los registros de existencia o no de material. Agentes de la Policía Científica también efectuaron su labor.

El traslado del detenido se realizó, como se hace siempre, a la base de la Jefatura Superior para, después, emprender ruta hacia el helipuerto. Antes la reseña, el reconocimiento forense, la recogida de todo el material y la despedida de los operativos. En Madrid se analizará ahora todo lo que se ha intervenido a la espera de poder presentar ante el juez el informe sobre lo que la Policía considera que puede sustentar este arresto. Un arresto que precisamente se relaciona, por su forma, con otros llevados a cabo en los que los detenidos son vinculados con acciones de captación a través de las redes sociales. Perfiles que son muy controlados por las fuerzas de seguridad porque se sabe de la fuerza que pueden tener sobre los menores, por ejemplo.

La investigación continúa abierta. En Ceuta la Brigada de Información de la Jefatura sigue trabajando sobre posibles objetivos, sobre investigados que, se considera, pueden estar detrás de estas prácticas que han dado pie a múltiples operaciones no solo en Ceuta sino en otros puntos del país, como ha sucedido esta misma semana.

Las fuerzas de seguridad mantienen abiertas varias investigaciones aunque por líneas separadas, es decir, por un lado la Policía Nacional y por otro la Guardia Civil. No se cruzan datos y cada fuerza de seguridad mantiene sus líneas de acción. No obstante, en este caso concreto se da la casualidad de que el ahora detenido había sido investigado en su día por el Instituto Armado y también lo estaba siendo por el CNP quien consideró que había llegado el momento de explotar ya la operación con su arresto, algo que no consideró en cambio que debía hacer en 2016.

MATERIAL

Los agentes decomisaron gran cantidad de material

Los registros se llevaron a cabo con detalle y bajo la supervisión de la comitiva judicial presente para que todo se hiciera de acuerdo a la legalidad. Se contaba con las órdenes judiciales de entrada y registro. Del interior de la vivienda de Loma Colmenar se sacó gran cantidad de cajas que luego fueron trasladadas a Madrid en helicóptero. El material aprehendido tiene que ser ahora analizado por los componentes del Grupo que apurarán las horas antes de su presentación ante el juez del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional. Al margen de lo intervenido, durante la investigación que se ha hecho antes del arresto se ha rastreado gran cantidad de datos a través de internet.

ANTERIOR RELACIÓN

Relación con una operación de 2016

La Policía mantiene que el ahora detenido es integrante de la red salafista-yihadista que fue parcialmente neutralizada en noviembre pasado tras la detención de tres hombres y una mujer encargados de radicalizar a menores y adoctrinarles en el extremismo religioso y la entrega absoluta al DAESH.

ALGUNOS MENSAJES

Odio y atentado contra las fuerzas de seguridad

La Policía resalta que “de manera similar al modo de actuación de los autores de atentados terroristas sucedidos recientemente en suelo europeo, el detenido había declarado públicamente su animadversión a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, e incluso había llegado a agredir a integrantes de la Policía Nacional durante una intervención en el barrio de el Príncipe, habiendo proferido en varias ocasiones amenazas directas a agentes policiales de la zona”, destacan. No tenía una profesión concreta pero se dedicaba a hacer traslados en coches a otras personas hacia la frontera. Vivía en las 317 VPO por canje tras la expropiación de terrenos familiares.

EN EL POBLADO LEGIONARIO

La Policía Nacional intervino en el Poblado Legionario en un registro llevado a cabo enmarcado en este operativo

El aparcamiento ubicado frente al colegio del Príncipe amanecía ocupado por decenas de vehículos de la UPR y de la UIP que se encargaron desde primera hora de la madrugada de dar la seguridad requerida por los agentes de Información que llevaban a cabo este operativo. En el Príncipe se actuó al practicar un registro pero en la barriada no se produjo detención alguna. La única llevada a cabo fue en Loma Colmenar. Según el comunicado del CNP, “esta operación policial se enmarca dentro de la estrategia del Ministerio del Interior para la detección temprana y neutralización inmediata de potenciales células o actores terroristas con capacidad de cometer atentados en nuestro país”. La operación, que continúa abierta, se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción número 5 y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, contando con la participación de funcionarios de la sede de Ceuta.

ESTADÍSTICAS

203 detenidos desde el año 2015

Desde el 26 de junio de 2015, fecha en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista (NAA), las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a 158 presuntos terroristas en operaciones realizadas en España y en el exterior y a un total de 203 desde principios de 2015.

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