Un hombre fue detenido en la noche de este lunes en Tánger al ser sospechoso de participar en un caso relacionado con plagio contraviniendo las leyes y por tráfico de drogas. Los servicios de seguridad pública del estado de seguridad de Tánger fueron los encargados de llevar a cabo esta operación en la que, tras el arresto, se comprobó que el detenido cuenta con numerosos antecedentes policiales según informó el medio local Tanja24.
Las fuerzas y cuerpos de seguridad de Marruecos ya sospechaban de un vehículo estacionado en un aparcamiento durante más de dos meses, por lo que se comenzó una inspección minuciosa del coche en presencia de su dueño. Tras analizar el vehículo, los agentes se pudieron incautar de 81.800 tubos de cinta de silicona, utilizados para las anestesias, además de encontrar en su domicilio una cantidad indeterminada de dinero, una demanda judicial y tres dispositivos de comunicación y facturas de teléfono y de otros servicios falsificadas.
El detenido pasó tras su detención a prisión preventiva, a la espera de pasar a disposición judicial para que sea juzgado por el tribunal de la Policía Judicial de Tánger. El Ministerio Fiscal de Marruecos también se personará como acusación, con el fin de esclarecer los hechos delictivos supuestamente cometidos por el sospechoso.
Golpe al narcotráfico y al tráfico de personas en Agadir
También este lunes la Policía marroquí arrestó en la ciudad atlántica de Agadir, a unos 600 kilómetros al suroeste de Rabat, a cinco personas por formar parte de una red que planeaba introducir emigrantes ilegales y hachís a las islas españolas de Canarias, según informó una fuente de seguridad.
La red se disponía, según la fuente, a trasladar hasta Canarias a siete emigrantes clandestinos y en el envío incluirían 463 kilos de hachís, pero la operación fue frustrada por los servicios de seguridad.
Según los primeros elementos de la investigación, los miembros de la red planeaba trasladar a los siete emigrantes y a la droga valiéndose de grandes cámaras neumáticas hasta alta mar, donde les esperaría un barco de pesca marroquí que continuaría la misión hasta la costa española.
La fuente precisó que los emigrantes clandestinos fueron detenidos y la droga, que estaba distribuida en 18 bultos, fue confiscada durante la operación policial que se desarrolló en la playa de Anza, en Agadir.