Con la detención del patrón del pesquero ‘Ana y Francisco’, la de un marroquí que le acompañaba y el decomiso de cien kilos de hachís se ha cerrado la llamada ‘Operación Caballa’ con la que la Guardia Civil ha dado por terminado el seguimiento al tráfico de estupefacientes haciendo uso de pesqueros para el trasvase a la península.
Tal y como ayer informó el Instituto Armado, la intervención se ejecutó tras varias investigaciones de la Policía Judicial, en base a las cuales se presumía el desarrollo de pases de droga ocultándola dentro o debajo de pesqueros con base en el puerto ceutí.
Tras varios seguimientos y constantes vigilancias, ayer se tuvo conocimiento de que podría ejecutarse la salida de un pequeño alijo de unos cien kilos de hachís, por lo que se optó por actuar sobre el pesquero objeto de sospecha.
Después del registro del barco, que se encontraba atracado en el muelle pesquero, se halló la droga sumergida mediante la utilización de pesas, que impedían que pudiera emerger hacia la superficie.
Como consecuencia de la actuación, se procedió a la detención inmediata del patrón del barco y de un súbdito marroquí enrolado como tripulante del mismo.
Intervenciones previas
Ambos han sido vinculados con un presunto delito contra la salud pública, quedando la droga intervenida y la pareja puesta a disposición judicial en compañía de las diligencias instruidas.
El pasado 24 de junio era la Policía Nacional la encargada de detener en la ciudad al presunto proveedor de droga que era trasladada a la península en pesqueros, aprehendiéndose más de mil kilos de hachís. Más atrás en el tiempo la propia Guardia Civil decomisó poco más de 30 kilos de hachís también en el puerto pesquero, tras recibir una información de la posibilidad de que se estuviera ocultando droga para su posterior traslado a la península en algún pesquero.
La embarcación ha quedado intervenida y la investigación, de momento, ha terminado con esta intervención.
Así ocultaban la droga, paso a paso
1 Preparación alijo
Se preparaba la salida de una cantidad de droga mínima que amortizara la salida del pesquero en dirección a la península. En el caso de marras se procedió a la ocultación e intento de trasvase de cien kilos de hachís
2 Se amarra en la parte baja
Tal y como se muestra en la primera de las imágenes aparece la droga en la red completamente cerrada. Ésta se coloca en la parte baja del barco para que pase desapercibida en cualquier tipo de control superficial cuando la Benemérita solicita la documentación a la embarcación.
3 Se impide la salida a la superficie
Esto se conseguía colocando pesas dentro de la red para hacer que ésta pesara más de lo debido. Así se impide que el bulto con la droga pueda salir a la superficie. Durante la navegación el pequeño alijo va escondido debajo del barco. En este caso se tenía la información de que se estaba preparando una salida de droga. Tras inspeccionar el barco se encontró la red oculta en los bajos, con el peso suficiente para navegar a peso muerto.
4 Otras intervenciones en pesqueros
Esta operación no es la primera que se ejecuta sobre individuos que utilizan presuntamente pesqueros para el traslado de hachís. El pasado junio fue la Policía Nacional la que detectó este tipo de pases deteniendo en Ceuta al proveedor de la droga y decomisando más de una tonelada de hachís.
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