Varias toneladas de distintas sustancias estupefacientes han sido destruidas este martes en Tánger, al norte de Marruecos, después de que las autoridades de este país concediesen su autorización para quemar este importante volumen de droga confiscada entre la que había de bultos de hachís a placas de cocaína. El medio de comunicación marroquí tanja24.com ha sido testigo de esta operación consistente en eliminar tal cantidad de decomisos así como otra mercancía que cataloga de prohibida.
Estos alijos fueron decomisados a los protagonistas de su intento de pase así como a los narcos que habitualmente operan en el Estrecho de Gibraltar y que en diversas operaciones fueron descubiertos por las fuerzas de seguridad marroquíes, que en los últimos tiempos también consiguieron interceptar grandes cantidades de droga en operaciones en las que a veces se logra recuperar estas sustancias prohibidas, pero sin conseguir arrestar a las personas que pretendían hacerlas llegar en la mayoría de casos hasta la Península.
De este modo, las autoridades en Tánger destruyeron varias toneladas de droga de diverso tipo. En concreto había kilos de cocaína, hachís... En definitiva, droga incautada en diferentes operaciones que fueron quemadas este martes, según informa el medio local tanja24.com. Las imágenes denotan el protocolo que sigue tras llegar al monte el cargamento en vehículos pesados: los fardos se ponen en fila y se aplica el fuego, o bien se arroja algún combustible, para que arda.
Golpes al narco
Las personas encargadas de esta quema controlada colocaron en fila los fardos y demás estupefacientes empaquetados para facilitar su transporte. Una vez colocados en un sentido favorable para que el viento no arrastrase el humo hacia ellos ni hasta núcleos poblacionales cercanos, los incineran aplicando fuego
Periódicamente, debido a los constantes golpes al narco, las autoridades locales ordenan la calcinación de grandes cantidades de droga que se han ido recuperando en operaciones protagonizadas por las fuerzas de seguridad. Una actuación que ha sido puesta en tela de juicio por las asociaciones en defensa del medio ambiente porque, aseguran, puede provocar grandes daños en el entorno además del peligro que entraña por motivos de salud pública.
HAY HAY MOHAMED Y NO LO VAMOS A CREER?