Una vida entera ligada al RING-7 en Ceuta. 40 años que le convirtieron en el cabo mayor más antiguo de España del Arma de Ingenieros. A Franci Valero se le tenía que despedir como se merecía, y su gente, quienes fueron su “segunda familia” como reconoce su hermano Gerardo, quiso estar a su lado. Este martes se procedió a su incineración, y los que fueron sus compañeros portaron el ataúd a hombros para trasladarlo del coche fúnebre al horno crematorio, mientras sonaba ‘La muerte no es el final’. Fueron momentos emotivos pero también necesarios para una familia unida como una piña en la despedida a Franci, cuyo fallecimiento ha sido lamentado desde distintos ámbitos.
Este homenaje mostró la implicación del Ejército con los suyos y el respeto hacia quien hizo historia en la unidad más antigua y condecorada del Arma de Ingenieros. Sus compañeros estuvieron en esta despedida y desde que se conociera su fallecimiento han sido cuantiosos los mensajes recibidos por quien entregó su vida al RING-7, conociendo a distintos mandos. Desde la Comgeceu, con su comandante general al frente, se testimonió el pésame a la familia y se rindió homenaje a Valero.
La familia de Franci ha agradecido este gesto tan importante en unos momentos de tanto dolor. El porte del ataúd a hombros fue presenciado por sus seres queridos y por quienes fueron compañeros de Ingenieros además de integrantes de otras unidades que conforman el Ejército en Ceuta.
Hace año y medio el propio Valero narraba a este periódico sus vivencias en el Arma de Ingenieros, la emoción vivida cuando selló su juramento y el aprendizaje alcanzado durante tanto y tanto tiempo en las mismas filas. Las imágenes de esa despedida, de ese último momento fueron recogidas en un vídeo que queda para el recuerdo de toda la familia.
Lamento mucho el fallecimiento de este buen hombre. Han pasado 15 años y lo recuerdo como si fuera ayer, el día que me hizo entrega del escudo del RING-7 cuando partí de allí. Lo guardo con mucho cariño. Que descanse en paz.