La Plaza de la Constitución volvió a acoger otro Círculo de Silencio para visibilizar el drama que sufren quienes no encuentran defensa alguna, para, en definitiva, “defender la dignidad de los que la tienen pisoteada por las políticas migratorias españolas y europeas”. Siguen muriendo personas etiquetadas como cifras, el mar sigue devorando cuerpos mientras los países se entregan a una operación de blindaje de fronteras. Lo hizo Italia y Grecia mientras la tragedia “tiñe el Mediterráneo con varios naufragios” que dejan muertos y desaparecidos.También se blindan Ceuta y Melilla, llevando a la elección de las rutas más peligrosas. En las últimas semanas han aparecido cadáveres en las costas de la ciudad hermana y de la nuestra, ejemplos de unas tragedias de personas que terminan siendo enterradas sin identidad. Son los sin nombre, los protagonistas de una Europa que para el Círculo de Silencio debe tener claro que “lo primero, siempre, son las personas”. “Exigimos compromiso político para evitar más muertes y heridos en el Mar Mediterráneo y las fronteras de Ceuta y Melilla. Además de vías legales y seguras que no vulneren de manera sistemática los derechos que todos tenemos como personas”, explicaron en el manifiesto. Las últimas informaciones publicadas sobre el mayor papel de medios marroquíes en los rescates se suma el hecho de que una vez que se lleven a cabo esas intervenciones, los inmigrantes estarán en manos de “quienes no respetan los derechos. Estas personas son desplazadas de manera forzosa e inhumana a ciudades de frontera con Mauritania y Argelia e incluso muchos llegan a ser expulsados a sus países de origen”.