Hoy me he despertado con dudas sobre mi identidad política, estuve toda la noche ceutí paseando por el Hacho en un ataque de insomnio provocado por el ulular del Dios Eolo... aproveché para considerar (consultar a las estrellas) y reflexionar sobre la izquierda y la derecha política, en tantas ocasiones separadas por una delgada línea roja...
¿El nacionalismo catalán es de derechas o Izquierdas?
¿Estar en contra de la política lingüística de las comunidades con lengua vernácula que dejan fuera de juego a buenos profesionales, es de derechas?
Es de izquierdas pensar que todos los españoles debemos tener los mismos derechos y las mismas obligaciones, o eso es de derechas?
¿Es de izquierdas que muchos afiliados a los sindicatos sean de derechas?
¿Es de derechas pensar en una política migratoria justa, sentirte orgulloso de tu patria, de tus costumbres, de tus señas de identidad?
¿Es de izquierdas o de derechas oponerse a que cualquier tipo de religión entre en la escuela pública? ¿Y pagar impuestos, es de derechas o de izquierdas?
Ya no sé... Lo que sí sé es que la política debe mejorar la comunidad y la comunidad debe ser el mundo en que vivimos y no la calle en la que estamos empadronados.
Todo lo que hagamos de una manera individual, nos afecta de un modo colectivo. Si no es así, sálvese quien pueda.
El hambre, la injusticia, la insolidaridad, la guerra, la explotación del hombre por el hombre, la libertad, la liberación de los ilimitados fanatismos, los sofistas, los vendedores de crecepelo, los iluminados, los santos que mean... Esos son los temas que, de un modo u otro, expondremos y debatiremos con los alumnos en la denostada optativa de Educación en Valores y en las clases de Filosofía en los días que vienen
Tal vez, entramos en un mundo en que las ideologías no puedan asumir las necesidades y demandas sociales. Necesitamos gestores que trabajen la realidad social, que busquen en lo colectivo una salvación del individuo.
Cuando oigo que los catalanes se sienten un pueblo oprimido, que los animalistas defienden los derechos de los animales como si fueran personas, cuando veo que se puede gobernar con programas políticos utópicos, cuando pienso que es imposible una crítica dentro de las disciplinas del partido, cuando contemplo que las derechas y las izquierdas apoyan o denostan dictadores y salvapatrias según la cuerda que defiendan, me pierdo en la hostilidad de lo absurdo, en la mercancía de los politólogos compradores de votos.
Ya lo dijo Platón: “Que sean los filósofos los gobernantes".
Necesitamos a muchos Sancho Panza gobernando las ínsulas Baratarias de nuestras tierras.
De nuestro 15M me quedo con una frase que resume esta filosofía de la sospecha... "¿Dónde está la izquierda? Al Fondo, a la derecha.
* Carlos Antón Torregrosa es profesor de Filosofía del I.E.S Luis de Camoens