La
guerra entre bandas que, más allá de las calles, sus miembros han llevado a las redes sociales, sobre todo a Instagram, con perfiles anónimos que difunden todo tipo de acusaciones y, en ocasiones, amenazas contra supuestos miembros del clan rival, sigue dando trabajo a la
Policía Nacional de Ceuta.
Uno de los jóvenes del
Príncipe señalados durante los últimos días en Internet como presunto implicado indirecto en el
crimen que acabó con la vida de Dris Amar la madrugada del lunes tras ser acribillado en el Poblado Legionario, ha denunciado en la Jefatura Superior la divulgación en esa red de “fotos con inscripciones” imputándole distintos delitos.
Entre otras cosas el denunciante ha alertado a la Policía Nacional de que se le atribuye “comprar armas” y posteriormente entregarlas a personas para que puedan “hacer lo que quieras [sic]”.
El joven también ha rechazado como otra “difamación” que se le achaque haber telefoneado a ‘Piolín’, en busca y captura desde hace meses, para alertarlo de que un familiar de Dris Amar había denunciado a su hermano, lo que habría generado que “a continuación subió él y
su pandilla y no tuvieron piedad con el pobre Dris”. El mismo denunciante ha aseverado en su comparecencia ante la Policía que en Instagram se ha publicado “una relación de fotos en la que aparece el dicente junto a información policial sobre antecedentes y la banda a la que supuestamente pertenece, así como informe oficial de antecedentes policiales” cuya procedencia “desconoce”.
La divulgación de contenido de esa naturaleza se ha seguido repitiendo durante toda la semana. La denuncia se formalizó el pasado miércoles, 12 de octubre, poco antes de las 15.00 horas.
El mismo joven ha aportado para probar que de ninguna manera pudo tener ninguna participación en la muerte de Dris Amar la factura de un establecimiento hotelero en el que afirma que las cámaras pueden demostrar que estuvo acompañado toda la madrugada del lunes, desde antes de las 00.00 hasta las 9.00 horas del día siguiente.
El enfrentamiento desatado entre los
grupos supuestamente encabezados por ‘Piolín’ y ‘Tayena’ ha venido acompañado durante los últimos meses de extraños virajes en las denuncias de supuestos testigos e implicados en altercados con armas de fuego de por medio. Uno de los más estruendosos fue la retirada de todas las denuncias contra ‘Piolín’ y ‘Laika’ por la muerte de Ibrahim Buselham la noche del Viernes al Sábado Santo de un tiro en la cabeza. Tras señalarles como autores materiales, todos los acusadores pasaron a declarar que habían sido coaccionados para decir eso por ‘Tayena’.