Categorías: Opinión

Demografía, desempleo y pobreza

Ceuta y Melilla con un 20.87% de nacimientos por mil habitantes se sitúan a la cabeza de la tasa de natalidad de los territorios españoles, teniendo en cuenta que la media de España es de 11.38%. Concretamente en Ceuta, en el 2010, el aumento de nacimientos ha sido de 132 respecto del año 2009. Se ha pasado de 1.515 a 1.647. Y en Melilla, en el año recientemente ido, han nacido 2.250 niños, lo que supone 141 más que el año anterior. Son cifras de escalofrío Ciñéndonos a nuestra ciudad, en un mínimo territorio de 20 km2 escasos se apiñan 80.000 personas, dando lugar a una densidad de 4.000 personas por cada kilómetro cuadrado. Una auténtica barbaridad. En una ciudad tan pequeña como la nuestra, que carece de recursos propios, problemas como la lucha por el territorio, la insostenible huella ecológica que esas ochenta mil personas dejan sobre el medio ambiente, el aumento del número de personas que viven bajo el umbral de la pobreza, el insoportable índice de desempleo, el enorme fracaso escolar, el bajo nivel cultural, el aumento de la delincuencia, el caos circulatorio, el ilegal cerramiento de parcelas, la construcción ilegal de viviendas, etcétera, todo ello, viene agravado por el aumento descontrolado de la natalidad. Esta situación se puede hacer insoportable y, por ende, peligrosa si no se toman cartas en el asunto y si quienes son los llamados a hacerlo continúan mirando para otro lado e ignorando el problema del aumento desbocado de la población. La presión sobre nuestro reducido tamaño podría dar lugar a un colapso de la ciudad y a hacerla prácticamente inhabitable y poco salubre.
No se descubre nada si se trae a colación que ese aumento del índice de la natalidad ceutí es debido en su mayor parte a la población de origen árabo-berebere. Según Anasagasti reflejó en su blog, a la vuelta de su visita a Ceuta, en nuestra ciudad nacen 4 niños de procedencia árabo-berebere por 1 de procedencia europea. No es casualidad que los niños de esta procedencia son los que tienen un mayor fracaso escolar, y que en las barriadas en donde viven suele haber un déficit de plazas escolares. A este ritmo, cuando se ha acabado de construir un centro escolar, hay que empezar a construir otro porque el aumento de los nacimientos es insoportable.
Tampoco es casualidad que las plazas de los planes de empleo del gobierno en su mayor parte están ocupadas por ciudadanos de procedencia árabo-berebere. Y como corolario de todo esto, los servicios sociales y asistenciales de la Ciudad soportan una presión enorme debido a la ayuda que prestan a personas en su mayoría de procedencia árabo-berebere.
A este respecto, no es de recibo que en estos tiempos los jóvenes de esa procedencia empiecen a procrear antes de los veinte años, y se llenen de hijos antes de los treinta, y lo peor de todo ello es que carecen de un futuro claro respecto de una profesión o de medios económicos y un catastrófico expediente académico.
Hay que hacer también una referencia explícita a aquellos que legal o ilegalmente, sobre todo marroquíes, se están asentando en nuestra ciudad. Todos ellos reclaman, o reclamarán con el tiempo, todo tipo de derechos: asistenciales, escolares, sanitarios, puestos de trabajo, viviendas, etcétera.
Es llamativo a este respecto que los sindicatos, las asociaciones de padres de alumnos y el profesorado en general reclamen medidas urgentes contra el fracaso escolar, tales como la disminución de la ratio y la construcción de centros escolares, y sin embargo no hacen alusión al aumento insoportable del índice de natalidad. Parece que ese asunto no va con ellos. Parece que nadie se siente concernido con ese aumento desmesurado de nacimientos.  
Allá por el mes de junio del año pasado, el profesor del departamento de Didáctica de la Universidad de Cádiz Rafael Jiménez Gamero presentó en el marco del Congreso Internacional sobre Flujos Migratorios y Codesarrollo en el área del Estrecho de Gibraltar los resultados del estudio elaborado bajo su dirección titulado “Explorar y comprender el fracaso escolar en el contexto multicultural de Ceuta”. No tengo noticias de que esos resultados hayan llegado a manos de las autoridades educativas de nuestra ciudad, pero sería interesante conocer si en las conclusiones se incluyen como causas, entre otras, el excesivo número de hijos en contextos deprimidos de ínfimo nivel cultural.
Lo que esta fuera de toda duda es que uno de los factores que se marcan como prioritarios para dar una explicación al éxito educativo es el nivel socioeconómico, cultural y lingüístico de la población. Respecto del nivel cultural las expectativas de padres y alumnos están relacionadas, aunque sea rudimentariamente, con el número de libros que hay en las estanterías de la casa familiar.
En Ceuta, en fin, la variable cultural del segmento de procedencia árabo-berebere en contextos deprimidos económica, social y culturalmente con un excesivo número de hijos es acaso la que más influencia ejerce en la educación de los hijos y condiciona la enseñanza en general de nuestra ciudad.

Entradas recientes

Nacho Gaitán e Isa Contreras, los vencedores en el deporte ceutí en el año 2023

Una Gala del Deporte 2024 que no dejó indiferente a nadie. El evento continuó con…

17/10/2024

Aisar y María Bohórquez, los mejores deportistas de Ceuta en 2022

Tras un año sin que se celebrara la popular Gala del Deporte de Ceuta, este…

17/10/2024

“El periodista puede llegar donde la Policía no”

La periodista Elena Merino cuenta con una amplia experiencia en el mundo del periodismo entrelazado…

17/10/2024

Aves de la península tingitana, la historia de 30 años

La Sociedad de Estudios Ornitológicos de Ceuta ha presentado en la tarde de este jueves…

17/10/2024

Ceuta se va de ‘Ruta de la Tapa Perfecta’

Salir por los bares de Ceuta siempre es buena idea. Si, además, existe la excusa…

17/10/2024

Jornadas de Criminología: los escenarios asociados al crimen

La clausura de las II Jornadas de criminología en Ceuta ha estado protagonizada por Paz…

17/10/2024