Si usted quiere saber de dónde ha salido el listado de personas que han podido ser repatriadas de Ceuta a
Marruecos tendrá que pedir una cita, como mínimo, con Mohamed VI. La polémica suscitada por quiénes van en ese listado de 300 personas y qué criterios se han seguido para elegirlos continúa viva porque nadie la aclara. La
Delegación del Gobierno incurre en un particular diálogo de besugos. Así, cuando El Faro de Ceuta le pregunta de dónde
sale el listado de las 300 personas, quién lo ha elaborado y quién se lo ha hecho llegar a Marruecos, la Delegación del Gobierno responde textualmente lo siguiente: “Pregunta a las autoridades marroquíes quién lo ha hecho. ¿Cómo te voy a responder yo por una lista elaborada por otro país?”. Seguimos con el diálogo de besugos: “Pregúntales a ellos”, dicen. Y cuando se le vuelve a preguntar cómo sabe Marruecos cuántas personas están atrapadas aquí y quiénes son, Delegación responde: “Pregúntales a ellos, yo no te puedo responder a eso”. Así que la máxima representación del Gobierno de Pedro Sánchez en Ceuta no sabe los criterios seguidos por el vecino país para elegir a los que serán
repatriados. Pero es más, es que ni siquiera se ha cumplido con la cifra porque la Policía Nacional ha dado por cerrado su operativo sin conseguir localizar a las 300 personas que se encontraban en ese listado. Marruecos ha dicho que no acepta a más tras asumir la entrada de 190 de sus nacionales atrapados en Ceuta desde el 13 de marzo, solo 5 que habían pasado por el pabellón, según fuentes oficiales. Los agentes de las fuerzas de seguridad han dicho a los que estaban concentrados en Arcos Quebrados que se vayan de allí, que marchen a ‘La Libertad’. La polémica está servida, teñida de indignación. Hay particulares como Sabah y asociaciones que durante estos 70 días han tenido en viviendas, en naves y garajes acogidos a decenas de personas, quitándole un problema a las autoridades políticas porque se han encargado de darles un cobijo y alimentación, sin que tuvieran que estar en los pabellones ya de por sí masificados. Han acogido a personas con cáncer, como es el caso de una mujer de extrema gravedad que no ha sido incluida en la lista. También tenían a personas mayores, a madres con niños. Eso de que la prioridad iba a ser para ellos es falso porque en los autobuses han marchado gente joven mientras que en Ceuta quedan los mayores y familias. A la Delegación del Gobierno se le dio el listado de estas personas y según manifiestan quienes les han acogido se les dijo que iban a salir a Marruecos todos los que estaban en casas, transfronterizos registrados por la Policía Nacional. Ahora ya se les cierra las puertas además de que no se les da explicaciones. Personas como Sabah aseguran que van a cerrar las puertas de los lugares en donde durante todo este tiempo han acogido a los marroquíes realizando, no solo una buena obra solidaria, sino que también quitando un problema a los responsables políticos.
Muchos marroquíes han acudido a pedir explicaciones a ‘Luna Blanca’, que recogió teléfonos para ir llamando durante toda la noche a las personas que iban en las listas. Les piden explicaciones a ellos de por qué no han salido. Es un caos y un despropósito que nadie aclara. Una repatriación ocurrida en Ceuta y Delegación del Gobierno no da explicaciones, remitiendo a buscarlas en Marruecos.