La Delegación del Gobierno en Ceuta estudia la forma de acabar con la obtención de mercancía en las proximidades de la frontera para evitar las avalanchas derivadas del porteo. Juan Hernández, jefe de gabinete de la Delegación del Gobierno, reconoce que aún no han dado con la “fórmula” para terminar con estas avalanchas, pero anunció que a partir del próximo lunes se va a actuar para que las personas que se dediquen al porteo no puedan obtener mercancía que más tarde es requisada por Marruecos.
“Si conseguimos evitar que la persona que pasa por Tarajal I tenga acceso a ese tipo de productos, no hay problema. Pasan como vienen, con dos bolsitas. El problema es cuando se produce el parón que puede ocasionar una desgracia y eso es difícil de canalizar, porque son muchas personas y es muy complejo”, admite Hernández. No obstante, asegura tener la “confianza” de que en breve se puedan alcanzar medidas para que esta presión del comercio transfronterizo no se dé a diario, sino que sean casos puntuales, que no desborden a su vez a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a la policía del país vecino.
Además de controlar la venta de productos en las inmediaciones del paso fronterizo, Hernández va más allá y cree que lo más conveniente es evitar que esa mercancía que Marruecos considera como competencia desleal no llegue a Ceuta ya que se sabe que su destino final está al otro lado de la frontera, pero admite que eso “es imposible”, porque “en Ceuta puede entrar de todo” y a su vez no se le puede poner trabas para que salga por la frontera. Lo que sí está estudiando es la manera de que ese producto no llegue a los porteadores, reconociendo que se paga mejor el bulto de textil por el Tarajal I que la mercancía que logra pasarse por el Tarajal II, admitiendo que se trata de “una batalla difícil de solucionar. La solución es muy fácil, a simple vista: que no les llegue el producto”
De momento ha informado que a partir de la semana que viene, si las obras de la N-352 así lo permiten, empezarán a llevarse a cabo actuaciones para acabar con esta venta de esta mercancía y obligar que por el Tarajal I sólo pasen personas con sus “dos bolsas” habituales de productos admitidos por el país vecino, consiguiendo así un paso fluido en la frontera.
Señala como punto de confluencia para conseguir la mercancía a las inmediaciones de la frontera, asegurando que es allí donde se forma un “mercadillo” donde las personas consiguen los bultos de mercancía. “Tiene que ser una actuación global entre Policía, Guardia Civil y Policía Local, que se produce justo en frente de la frontera y ahí es donde está el problema, en la facilidad en la que a ellos le llega la mercancía”, detalla Hernández.
Reitera que están estudiando de qué manera acabar con esta venta, pero que aún no han sido “capaces” de dar con la manera de lograrlo. “Yo espero y soy optimista que en el mes de octubre esté solucionado y ya no tengamos este tipo de problemas de avalanchas ”.
Que novedad, al final alguna vez la frontera sera frontera o todo son mentiras,
Venga fórmulas, en plan Axterix, Obelix y la marmita con la fórmula mágica. Han montado un laboratorio para hacer pruebas con los elementos y todo para contentar a Marruecos. Vamos a mejor.