Los cuatro detenidos (especificándose la minoría de edad de uno de ellos, de 17 años) estaban acusados de insultar a la fuerza pública, golpear y lesionar sus derechos y otros delitos como desobediencia, violación del estado de emergencia sanitaria o el no retirarse de la concentración. Eso sí, siempre recordando que los manifestantes iban completamente desarmados en el momento de sus reclamaciones.
Todos los vecinos de Castillejos han ido denunciando la injusticia que se ha cometido con estas cuatro personas, reclamando que sean puestas en libertad. Las dos concentraciones no han tenido un organizador concreto, sino que ha sido algo movido a través de las redes sociales. A pesar de ellos, las fuerzas de seguridad detuvieron a estas cuatro personas acusándolas de la organización de un acto que terminó con cargas policiales y altercados. Ahora quedan libres.