En abril de 2016, el Ministerio del Interior anunciaba que el proyecto de mejora del espigón de Benzú, que separa Ceuta de Beliones, estaba “prácticamente ultimado”.
Hoy, seis años después, esa barrera fronteriza está cada vez más degradada tras haberse desprendido parte del hormigón, rompiéndose toda la punta final sin que ya los guardias civiles puedan acercarse al extremo para prestar vigilancia o auxilio humanitario. Las obras que se hicieron en este punto constituyeron unos refuerzos temporales. El aspecto que ofrece hoy día es pésimo, tanto que incluso supone un riesgo más que evidente para los agentes y para las personas que intenten sortear este espigón y confíen en pasar por el lugar.
El Ministerio del Interior no solo no cumplió aquel anuncio de 2016 sino que además tampoco dispone de una partida económica para intervenir con la celeridad debida en este lugar. La situación del espigón de Benzú es mucho peor que la del Tarajal, cuya permeabilidad era puesta en evidencia por la Asociación Española de la Guardia Civil -AEGC- este mismo fin de semana, en una denuncia que fue publicada por este periódico. Con ambos espigones fronterizos sin intervenciones de urgencia a la vista, el servicio de control que presta el Instituto Armado en los extremos de la llamada Frontera Sur vienen marcados por el abandono y el riesgo.
Los espigones son, además, una de las vías más explotadas para la entrada de nadadores a Ceuta. La valla levantada en el de Benzú fue reforzada y coronada con peines invertidos, mientras que en Marruecos se siguieron colocando hileras de concertinas tanto en la misma valla como en su parte inferior próxima al mar.
A finales de julio, el Ministerio del Interior aprobó una partida de 4 millones de euros para, entre otras labores, implementar la malla antitrepa y colocar esclusas en la frontera. No se ha comunicado ninguna actuación integral sobre los espigones. De acuerdo con las estadísticas publicadas esta misma semana sobre el balance de inmigración, desde el 1 de enero hasta este pasado domingo, 31 de julio, se han registrado 652 entradas de inmigrantes registrándose como vía más utilizada el cruce de la valla o el bordeo de los espigones, predominando precisamente este último como el considerado más fácil entre los grupos de jóvenes, la amplia mayoría marroquíes, que tienen por objetivo alcanzar la ciudad para después, desde Ceuta, proceder a su incursión en la Península.
La frontera de Ceuta es un COLADERO, se mire por donde se mire.Lo mismo se cuelan por la valla, que por el espigon del Tarajal, que por el espigon de Benzú.No se en que estará entretenido el Sr. Marlaska y su Gobierno, que no adoptan las medidas necesarias.
Mira que ceuta recibe un pastizal de madrid y bruselas .y nunca hay dinero !! Ni fabricas ni produccion a fondo perdido !!
Señor Marlaska en España coexisten dos maneras de trabajo una destaca por su buen hacer, su inventiva y que aporta satisfacción a la larga del trabajo bien hecho, la segunda que es la imagen que tenemos a los ojos de nuestros socios europeos que somos unos vagos y chapuceros.
Creo que tendría que valorar la imagen que esta dando en Europa en cuanto a la gestión de las fronteras de Ceuta y Melilla.
Y otra vez más pregunto
Seguro que se estudiaron todas las alternativas antes de quitar las concertinas?
Dicen que en el fondo quedó la esperanza
Oh! Oh!
En lugar de arreglar colegios, que no corresponde a la ciudad que lo invierta en el espigón, si es que el gobierno de España no quiere