“Debemos dar todo tipo de facilidades a los clientes marroquíes, hoy son claves”

En una década MuecoCeuta no solo ha conseguido hacerse un hueco en el sector del mueble y la decoración ceutí, sino que se ha convertido en un importante referente. Con la llegada en los últimos años del comprador marroquí este negocio, que cuenta ya con tres establecimientos en la ciudad, ve cómo su negocio continúa siendo bien considerado entre sus clientes. A ellos, y por supuesto a los 20 trabajadores que la empresa tiene en plantilla, agradece el fundador de la empresa, Aurelio Murcia, su fidelidad, trabajo y compromiso.
–Diez años desde que, allá por 2002, decidieran fundar su empresa de mobiliario y decoración, ¿qué balance hace de estos años?
–Bastante positivo porque, a lo largo de todos estos años, hemos ido siempre a más. Empezamos con una sola tienda y ahora contamos con tres. Hemos ido creciendo y, además, ahora mismo estamos construyendo un almacén de tres plantas y 1.500 metros en Loma Margarita. Ahí se ubicará después todo el tema de almacenaje para, posteriormente, proceder al reparto. A la vez también utilizaremos este emplazamiento para realizar el montaje de los muebles. Se convertirá ese almacén, en cierta medida, en el campo base.
–¿De qué está más orgulloso?
–De todo lo que hemos conseguido, en especial de poder tener a 20 personas a nuestro cargo y poder mantenerlos a todos en sus puestos de trabajo. Ahí estamos manteniéndonos, un mes con más facilidad que otro, pero sacando para adelante la empresa.
–Además de la construcción del local que apuntaba antes en Loma Margarita, ¿tienen algún otro proyecto en mente?
–Ahora mismo la prioridad es mantenernos, hay ideas en mente pero es preferible esperar un poco de tiempo hasta que la situación general mejore. Eso sí, la construcción de esa nave tiene como objetivo quitarnos alquileres que suponen gastos innecesarios. Con esto creo que ya hemos llegado, al menos en la ciudad, al tope que debíamos llegar.
–¿Cómo nació la idea de fundar ‘MuecoCeuta’? ¿Por qué este sector de los muebles y la decoración?
–El motivo es sencillo. Yo llevo prácticamente toda mi vida trabajando en el tema del mueble, pues antes estaba con una empresa de este sector. Por eso llegó un momento en que decidí emprender solo esta aventura y, afortunadamente, ha salido bien.
–Imagino que en su momento detectó que había un hueco en el mercado que debía ser llenado por alguien, ¿no?
–Efectivamente. Sobre todo lo que creo que se necesitaba entonces era gente joven porque desde hacía muchos años quienes trabajaban en este sector eran los ‘antiguos’, emprearios que llevaban toda su vida... El ámbito del mueble necesitaba, opino, cierta renovación. De hecho, todo el mundo ha podido darse cuenta de que apenas entran a Ceuta camiones de la península cuando antiguamente venían muchas empresas de fuera vendiendo muebles. Es algo que ya no se ve. Creo que una cosa que se ha conseguido es que el cliente se deje el dinero dentro de la ciudad, que es lo que hace crear empleo.
–Claro, comprar el mobiliario de toda una casa es una inversión importante...
–Efectivamente.
–Cuentan con una veintena de trabajadores, ¿qué destaca de esa plantilla?
–Que si no fuera por ellos no estaríamos donde estamos. ‘MuecoCeuta’ es un grupo de personas y ellos son quienes llevan la empresa para adelante. Aunque el fundador y quien ha dado las directrices haya sido yo junto con mi señora, que también trabaja en la empresa, si no es por ellos no habríamos evolucionado y ni estaríamos como estamos hoy.
–Hace diez años, en plena bonanza económica, era en principio un momento idóneo para emprender. Pero, al fin y al cabo, tratar de arrancar una empresa nueva siempre implica correr ciertos riesgos, ¿qué motivos le animaron a lanzarse?
–Aparte de ciertas discrepancias en mi trabajo anterior, una buena oportunidad venía porque en ese año 2002 es cuando se produjo la entrega de las viviendas de Patio Páramo. Después también dieron las llaves de la promoción de avenida Lisboa, las de Huerta Téllez... todo ello fue un empujón bastante fuerte porque los clientes se volcaron bastante conmigo. Por ello es importante darle las gracias a toda esa clientela.
–¿Cuál es el principal atractivo que ofrece ‘MuecoCeuta’ a todos esos clientes?
–La amabilidad y la excelente forma de atender a los clientes que tienen todos los empleados. Se les ofrecen todas las facilidades posibles y, a la hora de ir a medir o de terminar un mueble, somos super serios. Le damos prioridad a las reclamaciones antes que ha entregar un mueble para casas nuevas. Ofrecemos todo lo que el cliente se merece y creo sinceramente que se marchan contentos. Más de una vez me han comentado que habían terminado gratamente sorprendidos de cómo se les ha tratado desde que han puesto un pie en la empresa hasta que han obtenido sus productos.
–¿Y en lo referente al producto en sí, al mueble, cuál es su principal atractivo?
–Nos hemos centrado en lo que se demanda. Antes de que se produjese la crisis, en los primeros años de andadura de la empresa, se vendían bastantes muebles de categoría, de mucha calidad. Ahora, aunque todavía se venden algunos de esos, lo que más se demanda son las ‘melamina’, pues son mubles económicos y vienen muy bien para casas de alquiler, por ejemplo. Todo el mundo pide ofertas y la gente ya no gasta el dinero tan alegremente como antes.
–Entiendo, por tanto, que se han visto casi ‘obligados’ a cambiar la estrategia de la empresa en lo que a los productos que ofertan se refiere, ¿no?
–Sí, en eso estamos. Por eso tratamos de estar presentes en todas las ferias que se convocan para estar al día de lo último, de ahí que todo el que entra en ‘MuecoCeuta’ se quede sorprendido de que la decoración que ofrecemos es de lo último que ha salido. Ahora, con el aniversario de los diez años, he ofrecido a los clientes que todo lo que tenemos en exposición pueda adquirirse con un 30% de descuento para premiar su fidelidad, es algo que ha tenido bastante aceptación.
–¿Qué ventajas y qué inconvenientes tiene el ser su propio jefe, el trabajar para su propia empresa y no para lo que otros dirigen? ¿Si ponemos esos pros y esos contras en una balanza, de qué lado cae?
–Gracias a Dios la mejor ventaja es que me ha ido bien, así que solo puedo hablar cosas buenas sobre esta ‘independencia’. ¿La diferencia? Que tienes que adquirir muchísima más responsabilidad. No dormir muchas noches, estar pendiente de todos los pagos, de lo cual antes no me preocupaba yo... Te levantas y si alguien te dice que está enfermo y no puede ir al trabajo tienes que ver cómo lo sustituyes por otra persona... Pero si, como dice, ponemos todo ello en una balanza gana la parte de lo positivo.
–Cada día más el empresario ceutí pone su mirada en el cliente marroquí, ¿es usted uno de ellos? ¿Vienen muchos clientes del país vecino a MuecoCeuta?
–Sí, bastantes. Es algo que en los últimos meses se está notando cada vez más. Llegan bastantes marroquíes para adquirir objetos de decoración y encargar muebles. Incluso hemos vendido y montado cocinas completas en Marruecos. En Tánger, Tetuán... Estamos trabajando muy bien con estos clientes.
–También para los marroquíes la oferta de ‘MuecoCeuta’ será bastante exclusiva y difícil de encontrar allí, ¿no?
–Efectivamente. Cuando llegan a al tienda y ven la decoración todo les gusta y se quieren llevar de todo. El fenómeno se está invirtiendo respecto a hace unos años en que éramos los ceutíes quienes íbamos allí a comprar ciertas cosas.
–Entiendo entonces que usted, como empresario, apoyará que se trate de incentivar la llegada masiva de compradores marroquíes, ¿no?
–Claro. Creo que la mayoría de los empresarios apoyan esta postura porque, en el día a día, se está comprobando que gracias a las compras de los marroquíes se está medio manteniendo Ceuta. Nunca hemos visto tanta afluencia de coches de Marruecos. Habría que darles todo tipo de facilidades para que pasasen sin problemas cualquier día de la semana. Yo estaría dispuesto incluso a abrir las tiendas en domingo si fuera necesario.
–¿Y cómo ‘torean’ la llegada de empresas multinacionales a la ciudad?
–Bueno, a nosotros no nos ha afectado porque no tocan exactamente nuestro ámbito. E incluso creo que  atraen a más pesonas de Marruecos que, de paso, nos visitan también a nosotros.
–¿Algún deseo para este 2013?
–Por lo menos mantenernos al mismo nivel que el año pasado para no tener que tocar nunca al personal y mantener todos los puestos de trabajo.
–¿Es esa su prioridad, mantener al completo la plantilla actual?
–Sí, claro.
–¿Cuál fue el momento más exitoso de estos diez años?
–Desde la apertura de la tercera tienda en el Puerto, en 2009, cuando la crisis en Ceuta todavía no se notaba. Gracias a esa buena ubicación, con fácil aparcamiento, y la amabilidad... Creo que lo que prima en nuestra ciudad es el boca a boca, pues es raro que cuando llegas a ‘MuecoCeuta’ no salgas con algo. Lo que más nos importa es la seriedad y que, una vez que el cliente entra, esté atendido al 100%. Además, proporcionamos todo tipo de servicios, incluso si hace falta subcontratamos albañilerías para hacer todas las obras que sean necesarias en vivienda.
–¿Y han notado el efecto de ceutíes que compran sus muebles en la península y luego los pasan a Ceuta? ¿Sobre todo en grandes superficies que ofrecen precios muy económicos?
–La verdad es que no. Creo que la gente se está mentalizando de que, al final, entre la compra, el viaje, los problemas que te conlleva si el mueble tiene algún desperfecto... El cliente hace números y comprueba que al final no les compensa. Nosotros, además, también sondeamos mucho el mercado para no solo ajustarnos a los precios de la península sino, en la medida de lo posible, ofertar mejores precios.
–¿Y acuden a ustedes clientes de la península?
–Esta misma mañana me estaban solicitando amueblar una casa en Estepona, precisamente. Así que sin problemas. Se deja la mercancía en Algeciras y a allí van mi montador y mi repartidor y la ponen. En Granada también. Es gente de Ceuta que nos pide amueblar una segunda vivienda en la península.
–¿Y por qué no expandirse?
–Hemos pensado las dos posibilidades, tanto ir para Marrueco como abrir algo en la península. Marruecos, por las características del país, es bastante complicado para entrar. En la península sí que se ha barajado la posibilidad de montar algo, pero no en estos momentos. Es mejor esperar un tiempo a que la situación económica mejore.