Seis meses de cárcel y 150 euros de multa, además de la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 200 metros durante un periodo de dos años es la pena impuesta ayer por la magistrada del Juzgado de lo Penal número 2 a L.M., por un delito de robo con intimidación en grado de tentativa. Además, deberá indemnizar al perjudicado con 70 euros en concepto de los daños causados al teléfono que intentó robarle.
L.M. se conformó con unos hechos que ocurrieron el 27 de octubre del pasado año cerca de un pub del Poblado Marinero cuando le exigió a una persona que le entregara su móvil y el dinero que llevaba y dándose a la fuga, no sin antes reintegrarle la cantidad sustraída. Posteriormente, el perjudicado se encontró con el acusado y pudo recuperar el teléfono, aunque L.M. lo tiró al suelo y causó daños que han sido tasados en 70 euros.