“Cualquier extremismo es peligroso y preocupa”

Renueva candidatura con los deberes aprendidos y la “pasividad” de las Administraciones le llevan a tratar de que la barriada se rija por sí misma Vuelve otros cuatro años más a un cargo que nadie ha querido por lo que no hubo adversarios. Kamal se pone al frente de una junta con nuevos aires que va a tratar de que el autogobierno sea cada vez mayor en una barriada que reconoce es diferente a las del resto de la ciudad pero cuyos vecinos deben contar con los mismos derechos, así que anuncia que endurecerá las críticas y trabajarán duro para conseguirlo. Un nuevo proyecto en el que se impliquen los vecinos y que afronte desde la raíz los problemas de la barriada toma forma para que Príncipe Alfonso mejore de verdad y no empeore. Hay nuevos problemas y carencias similares y aunque en los últimos años han mejorado algunos aspectos, el trabajo que queda por hacer es mucho y ahora los vecinos, más que nunca, quieren que se haga aunque hay temas, como el yihadismo que está empapando la barriada, que remiten a los responsables gubernamentales para que solventen dada su envergadura.
–Tiene por delante otros cuatro años tras una elección que no ha estado exenta de polémica. ¿Qué ha pasado? Le han acusado de querer mantenerse en el cargo basándose en un reglamento que no convencía, por ejemplo, al anterior presidente vecinal que le precedió al frente de la Asociación Vecinal.
–Pasar han pasado muchas cosas, pero polémica ninguna. Acusarme de querer quedarme con el cargo es algo que sólo se ha escuchado de una persona,  y es la que has mencionado. Él sabe perfectamente que una asociación no puede existir sin unos asociados, de esta forma la junta directiva debe responder ante sus socios, los cuáles valorarán en cada momento la actuación de la Junta Directiva.  Otra cosa es cómo se llevaba realizando antiguamente, que la junta directiva no respondía ante nadie, ya que no había socios a quien dar cuentas del trabajo que se realizaba. Siguiendo los estatutos se convocaron elecciones y este señor, al igual que cualquier otro socio,  podría haberse presentado y no lo hizo,  por lo que no entiendo las polémicas a la que usted se refiere.
–¿Quién está en la junta y que vocalías representan?
–La junta está compuesta por vecinos de diferentes zonas de la barriada, diferentes edades e ideologías. Las vocalías que representan, a groso modo, son las que representan las diferentes consejerías de la Asamblea y los diferentes distritos de la barriada.
–¿Son cargos de su confianza cómo algunos han criticado o la junta ha estado abierta a todos los que quisieran aportar, como anunció en su día?
–Son cargos de confianza y como he mencionado anteriormente  ha estado abierta a todo aquel que ha querido participar en este nuevo proyecto sin despreciar a nadie.
–Centrémonos en la barriada y en los retos que pretende llevar a cabo. Apuesta por la creación de una red de asociaciones. ¿Con qué objetivo?
–Como todos sabemos, la barriada del Príncipe Alfonso no es un simple barrio, por sus dimensiones  y su población es algo mucho más grande, por lo que  requiere un punto de vista diferente a la de cualquier barrio de la ciudad. El nuevo proyecto de la barriada del Príncipe Alfonso está basado en el funcionamiento de un pequeño pueblo o bien dicho una pedanía,  por lo que la barriada se dividirá en distritos y  la junta directiva se dividirá a su vez en consejerías, con representación de vecinos de todas las calles del barrio, para detectar y gestionar con mas efectividad todas la quejas y toda la problemática de la barriada. Nuestro proyecto, pretende subvertir el orden tranquilo y conformista del actual equipo de Gobierno de la ciudad y ser mucho más exigente con la Asamblea en su actuación respecto al sector urbano más popular de la ciudad, y hacer ver que se puede pensar de otra forma muy distinta, y que hay otra forma de hacer las cosas y resolver los  problemas... Los vecinos utilizarán este plan para mejorar la calidad general de vida con el objetivo de hacer ver al Ayuntamiento que se puede pensar de otra forma muy distinta a la actual en materia de urbanismo, medio ambiente, alcantarillado, alumbrado, transporte...
–¿Podría caber la autogestión de recursos?
– En efecto se trata de un modelo de autogestión que añade una peculiar identidad e idiosincrasia al proyecto que pretendemos poner en marcha. Con este plan, queremos crear un debate abierto entre los vecinos y la Administración para conseguir un barrio homogéneo, equilibrado y  con las mismas prestaciones de servicios que el resto de la ciudad. Con un carácter de desarrollo comunitario, los planes contenidos en este proyecto que la asociación desarrolla, han ido evolucionando a lo largo de estos últimos cuatro años para ir dando respuesta a las necesidades de la barriada. Es verdad que se nos han quedado cosas por el camino, pero también es verdad que seguimos trabajando en ello... Por eso,  la formación, el empleo, las diferencias de género, la educación, la interculturalidad, el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación y el trabajo comunitario y de participación se convierten en ejes fundamentales de nuestro trabajo en este nuevo proyecto en el que ya estamos trabajando.
–Las últimas emboscadas y sucesos como los de la guardería de San Ildefonso demuestran que en el Príncipe sigue latiendo la delincuencia con fuerza. ¿Cómo analiza este problema y qué clase de solución propone a corto plazo lejos de la inversión en materia educativa y social cuyos resultados podrían verse más adelante?
–El cambio en los aspectos negativos de nuestra barriada se tiene que hacer desde la Administración Pública y a través de intervenciones y proyectos efectivos destinados a ello, como son la igualdad, la justicia social, el paro, la educación... y todo esto, debe estar acompañado de una buena inversión,  ya que nosotros, como simple Asociación de Vecinos  no tenemos ni los medios ni la capacidad de solucionarlos por nosotros mismos...  necesitamos del compromiso y la ayuda de la Administración. Y respecto a los sucesos a los que se refiere usted, la asociación interviene hablando y aconsejando a los vecinos para evitar toda esta clase de hechos que nos perjudican a todos.  Otra cosa no podemos hacer... ya que la lucha, persecución y prevención de los delitos es trabajo y responsabilidad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Nosotros no tenemos ni la fuerza ni las competencias para ello.
–La brecha social es cada vez más evidente y el radicalismo es un tema que debemos abordar si hablamos de la barriada a la que ahora le pone voz. ¿El vecindario está preocupado? ¿Cree que avanza y se hace fuerte el hecho de que muchos jóvenes decidan irse a hacer la yihad? ¿Lo reconoce como un problema?
–La verdad, no entiendo la pregunta... Esta clase de cuestiones se las debe usted plantear al Gobierno y no a una asociación vecinal. Cualquier extremismo es peligroso, y esto nos debe preocupar a todos... pero, sobre este tema concreto de la yihad, a nosotros, como asociación de vecinos ¿qué se espera que hagamos? ¿Qué se espera de nosotros?
–Yo de usted tan sólo espero que responda a la cuestión de que si este tema hasta qué punto preocupa a los vecinos.
–Sí preocupa a los vecinos y debería preocupar a todos los ciudadanos, no sólo a los vecinos de la barriada.
–Las Fuerzas de Seguridad aseguran que están trabajando en el control de mafias que captan las voluntades de los posibles yihadistas. ¿Esa es la solución?
–Supongo que sí y me remito a lo dicho anteriormente... Nosotros sólo somos una Asociación de Vecinos. ¿Qué se espera que nosotros hagamos? ¿Milagros?
–Ha denunciado presiones incluso políticas que le hicieron pensar en abandonar la candidatura y también ha dicho que no volverá a tropezar en la misma piedra en el ámbito de creer promesas que no se cumplen y que dará un tono reivindicativo a su presidencia. ¿Más aún? ¿Cómo?
–He sufrido críticas y presiones en los medios de comunicación, por la oposición sobre todo, pero  también hay que entender que se puede presionar de diferentes formas y una de ellas es desestimando todas o la mayoría de nuestras peticiones, proyectos, soluciones a problemas. Eso es también presionar. No he querido entrar en ese juego ya que la asociación esta desvinculada del ámbito político. Siempre hemos respetado a los políticos de esta ciudad tanto a los que gobiernan como a  la oposición, pero si hemos tenido que denunciar algo lo hemos hecho y sobre todo en los medios de comunicación. No nos inventamos las cosas. Si decimos que hay infravivienda es porque la hay, si decimos que los servicios básicos en el Príncipe son muy deficientes es que lo son, que el fracaso escolar, el paro  y la seguridad son problemas graves en la barriada, es la realidad que vivimos nosotros día a día, estamos hablando de cifras récord no sólo a nivel nacional, también a nivel europeo, eso no es victimismo. Ha habido muchas promesas incumplidas, pero eso no ha minado nuestras fuerzas, seguiremos trabajando con más fuerza en este nuevo proyecto para que los ciudadanos de la barriada de Príncipe Alfonso y sean en todos los ámbitos, iguales  a los del resto de esta ciudad.
–Tiene cuatro años por delante para mejorar las cosas en el barrio. ¿Proyectos?
–Este nuevo proyecto que hemos llamado ‘Proyecto Renovación’, está basado en el trabajo por conseguir un barrio con unas condiciones óptimas, tal y como marcan los estatutos  en lo que se refiere a infraestructuras, servicios básicos, viales, tráfico, seguridad, educación, sanidad,  cultura… por lo que seguiremos trabajando como hasta ahora con las diferentes concejalías para que los proyectos que todavía están por resolverse, así como los que podamos considerar como necesarios, los podamos ver como una realidad lo más pronto posible. Pero también nos preocupan otros aspectos que consideramos fundamentales para nuestro barrio: el acercamiento a la cultura, la correlación entre todas las organizaciones, el trabajo cooperativo, las acciones reivindicativas, la información a los vecinos sobre temas de actualidad, el acceso a las nuevas tecnologías, son cuestiones en las que se trabajará dentro de las diferentes vocalías de la Junta Directiva.
–Hay vecinos en el barrio que lamentan el olvido de las Administraciones y hay otros de otras barriadas que piensan que la frontera del Tarajal tendría que trasladarse y llegar hasta la barriada para separarla del resto de la ciudad por los problemas que genera por la alta delincuencia. ¿Qué tiene que decir?
–Es obvio que todos los vecinos lamentan el olvido de las administraciones publicas por diferentes motivos, una barriada que no es reconocida como por ejemplo en la legalización de las viviendas, que los servicios básicos no sean igual que el resto de la ciudad, que no haya una seguridad constante, unos servicios de limpieza deficitarios, el aislamiento de la barriada, son más que motivos para que las personas del barrio sientan esa dejadez. Respecto a aquellos comentarios de desprecio hacia esta barriada no merecen una respuesta, pero dejo claro que somos españoles, caballas, y ese tipo de comentarios atentan directamente contra la soberanía del territorio español.
–¿Qué ha aprendido de los cuatro años que han pasado?
–Estos 4 años me han enseñado que no es oro todo lo que reluce.  Los políticos que nos representan no hacen el trabajo que tendrían que hacer para la ciudadanía en general, pero sobre todo a lo que concierne a los problemas de esta barriada, hacen caso omiso a nuestras reivindicaciones, aunque denunciamos toda la problemática existente y sus posibles soluciones. También he aprendido que los políticos gandulean más que actúan  dependiendo del momento, aunque cuando se acercan las elecciones todos son promesas y proyectos, pero cuando pasan las elecciones nadie se acuerda de nada. La asociación de vecinos trabaja para la mejora de la barriada  trasmitiendo toda la problemática existente en el barrio y cuando ves que esa mejora viene con cuentagotas, no como en otras zonas de la ciudad, te desesperas… Y a título personal espero haber aprendido de mis errores, ya que éstos me han servido para conocer mejor a los vecinos, a las instituciones y las personas que trabajan en ellas. Eso es un punto a favor en esta nueva legislatura que empieza.