Los vecinos de ‘La Colina’, urbanización situada al lado del
Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes de Ceuta, son fieles testigos de cómo se va levantando un campamento paralelo en el que las casetas se construyen en cuestión de horas. Si hace unos días el Gobierno daba por zanjado esta problemática, las fotografías y vídeos de cómo se construyen nuevos asentamientos lo desmiente. No se trata solo de un problema de seguridad sino
también medioambiental ya que en estos puntos se acumula basura además de que se hacen hogueras que pueden terminar descontrolándose como ha sucedido en algunas ocasiones. Los propios inmigrantes recogen palés de madera para construir en mitad del monte las chabolas, ocupando todas las inmediaciones del campamento habitado por personas de distintos orígenes. Allí hacen su vida paralela a la controlada en el CETI y realizan hogueras que causan alarma e inquietud entre los residentes. Si bien es cierto que
Tragsa y la Guardia Civil estuvieron presentes en el levantamiento de 20 de estos puntos hace unas semanas, estas acciones son meros parches y soluciones que no sirven para dar tranquilidad a los vecinos del lugar que temen que en cualquier momento se produzca un incendio de grandes dimensiones en el monte que les rodea.
No encuentran solución. Viven al lado de chabolas ilegales y tienen que ser testigos de cómo estas se levantan sin encontrar veto u oposición alguna. Es una problema que no tiene punto y final porque no hay una reacción rápida que evite la proliferación de estos asentamientos que se construyen a plena luz del día, como queda reflejado en los vídeos y fotografías que han captado todo el proceso de la edificación. En varias ocasiones los Bomberos han tenido que intervenir para sofocar las llamas y se ha cursado varios avisos a la Guardia Civil y Policía cuando se han generado peleas entre los que ocupan estos asentamientos. Los vecinos de la zona residencial piden una reacción rápida que garantice su seguridad.