“No me estoy sintiendo presionado por la hostelería, me presiona solo el covid”

Asegura que no se ha sentido presionado por nadie desde que le han encomendado llevar las riendas de la Consejería de Sanidad. Por nadie en persona, ni por grupo de poder alguno establecido en Ceuta. Alberto Gaitán, a quien el 27 de enero le encomendaron relevar en el cargo a Javier Guerrero que tuvo que dimitir tras la polémica de su vacunación, hereda un equipo de profesionales en el que confía para ir ganándole terreno al covid-19 en una batalla complicada. En esta entrevista con El Faro de Ceuta, Gaitán reconoce que precisamente ese bicho es su “obsesión”, centrando todos los recursos de la consejería en debilitarlo después de que durante la pandemia haya causado hasta 80 víctimas mortales en nuestra ciudad.

-Le eligen como consejero a finales de enero, ¿cómo fue ese desembarco?, ¿se ofreció usted para cubrir el vacío de Guerrero o le designaron para ello?

-Mi desembarco en Sanidad fue a petición del presidente, como fue a petición suya que ocupara la Consejería de Fomento y Turismo y como fue su llamada para la Consejería de Economía. Estoy a disposición del equipo de Gobierno, del presidente y mis deseos de trabajar por Ceuta y por España.

-¿Ha encontrado reticencias a la hora de trabajar con el equipo que ha tenido que heredar del anterior consejero?

-No no, reticencias no. He tenido mucho apoyo y creo que una buena acogida. Todo lo contrario, me están ayudando mucho y nos reunimos permanentemente, la disposición del equipo es muy buena.

Sobre la vacunación de Guerrero: “No, yo personalmente no me hubiera vacunado”

-¿Va a seguir con ese equipo o prevé incluir a alguien cercano que sea de su confianza?

-En la situación y en el momento actual, creo que hay que seguir tirando con el equipo que nos encontramos. Es un equipo de técnicos no de políticos, conocen la situación, estaban en plena pandemia y creo que desmantelar ahora un equipo ya formado no iba a ayudar en la lucha contra esta enfermedad. Ellos son conocedores de la situación, llevan un año trabajando muy fuerte en este tema, muy duro. Me consta las horas que le están echando al trabajo, tienen bastante conocido el problema de la pandemia y creo que hay que seguir contando con ellos porque son los que saben y lo están haciendo formidablemente y es la mejor decisión.

-¿No prevé entonces cambios por alguien de su confianza?

-Ya lo iremos viendo, estoy recién aterrizado, son muchas áreas las que se tratan tanto en Sanidad como en Gobernación y ya veremos si hace falta algún refuerzo. Ahora mismo lo importante es no quebrar la estrategia seguida, avanzar lo más posible en la vacunación que es el objetivo número 1 que tenemos que desarrollar, intentar bajar las incidencias acumuladas... Y ese es el trabajo que se está haciendo. Creo que rotura de equipos y creación de equipos nuevos no va a suponer una mejora en la eficiencia.

-Se lo pregunto porque antes de su desembarco algunos trabajadores publicaron comunicados de defensa a ultranza de su predecesor, hasta el punto de advertir que podía haber dimisiones. Por eso le insisto en si no ha encontrado reticencias...

-Nada nada, vuelvo a insistir que tengo que agradecer a todo el equipo de Sanidad y de Gobernación el recibimiento que me han dado y yo les veo trabajando con muchas ganas, cansados evidentemente porque esto está siendo duro, pero con muchas ganas de mejorar la situación de Ceuta y de trabajar porque la campaña de vacunación sea un éxito y a la mayor rapidez.

"Ahora lo importante es no quebrar la estrategia seguida, romper equipo no supone una mejora”

-Ya comunicó el presidente Juan Vivas que ni él ni los demás miembros del Gobierno, al margen de Javier Guerrero, se habían vacunado. Si usted llega a ser consejero de Sanidad antes, ¿se habría vacunado como hizo Guerrero?

-No, yo personalmente no me hubiera vacunado.

-¿Entonces le parece correcto que él sí lo hiciera, que se vacunara?

-Aquí lo que se han seguido son criterios técnicos elaborados por técnicos, en donde establecían y recomendaban esas vacunaciones.

-¿Teme que esos técnicos que apoyaron esa vacuna, estando ahora ya el caso judicializado, tengan que dimitir o dar explicaciones de por qué casi ‘obligaron’ al consejero –como dijo el propio Guerrero- a vacunarse?

-Bueno, ahí lo que le puedo decir es que en el tema de la vacunación se sigue una estrategia a nivel nacional que establece una serie de grupos que son objeto de vacunación prioritarios. Se han ido vacunando en residencias, el grupo 2 sanitario y sociosanitario... Lo que ocurre es que la estrategia es un poco ambigua, no está bien definida en los criterios cuando empiezas a bajar en la escala de la denominación del grupo. Eso da lugar a que muchas veces haya problemas de interpretación de qué colectivo tiene que entrar o no. En el caso de las comunidades autónomas, no todas estamos coincidiendo en los niveles de integración de determinados colectivos en esa estrategia, pero no porque se vaya contra la estrategia sino por falta de definición.

"La estrategia de vacunación es un poco ambigua, no está bien definida en los criterios”

-¿Entonces cree que a la hora de designarse a Javier Guerrero como persona que debía vacunarse pudo haber algún tipo de ambigüedad?

-Creo que el comité técnico que estaba analizando la estrategia de vacunación llega a ese grupo 2 y la definición del grupo 2 no esta clara, como estoy diciendo. Ni de otros grupos, porque nos estamos encontrando con situaciones en las que no sabes dónde concretar a determinados colectivos. Se entendió por todos los técnicos que había que vacunarse tanto el consejero como el resto del equipo porque estaban en primera línea de exposición al riesgo. Estaban en contacto con gente que podía tener la enfermedad y así se hizo, es un criterio eminentemente técnico.

-En una entrevista ya como exconsejero sabe usted que se despachó y solo agradeció, con nombre y apellidos, el apoyo de Mabel Deu, sin citar al resto. ¿Le ha parecido eso correcto?

-No escuché esa entrevista, le tengo que ser sincero, porque no he tenido tiempo con todo lo que me supone aterrizar en la consejería, pero el apoyo siempre lo ha tenido de todos. Lo tuvo desde el primer momento y posteriormente, no puedo entrar en más, conmigo la relación es muy buena, cordial... son cosas que dijo... Tuvo que destacar a alguien y destacó a la vicepresidenta porque es vicepresidenta...

-Bueno, destacar... A los demás no los dejó muy bien.

-No lo he leído, pero me consta que todo el equipo de gobierno ha apoyado siempre a Javier y las relaciones con Javier son muy buenas.

"Me consta que todo el equipo de gobierno ha apoyado siempre a Javier y las relaciones son muy buenas”

-Desde que está al frente de la consejería, ¿está notando cierta presión de algunos grupos de poder? Por ser más clara, ¿está viéndose presionado en concreto por la hostelería?

-No, no me estoy sintiendo presionado por absolutamente nadie, me presiona simplemente el covid. Todo lo demás, mis relaciones con los sectores económicos de la ciudad siempre han sido muy buenas desde mi entrada en política. Desde la Consejería de Economía y Fomento han sido relaciones cordiales y directas, en Sanidad lo mismo. Estamos en contacto porque el aspecto económico es muy importante en la ciudad. No podemos ni bajar la guardia en el ámbito sanitario ni tampoco en el ámbito económico porque después de la pandemia, dios quiera que esto se solucione pronto, nos encontraremos con la realidad económica de la ciudad y eso hay que preservarlo lo máximo posible. La colaboración es total por parte del colectivo al que se refiere. Llegamos a consensos a una rapidez grande. La colaboración es absoluta.

-El presidente Juan Vivas reunió hace unas semanas a los portavoces de los demás grupos políticos, aprovechando un receso plenario, para darles a conocer los criterios de los técnicos que aconsejaban el cierre de la actividad no esencial. Después, ustedes consideraron que había que establecer unos umbrales desatendiendo por tanto esos criterios. ¿Lo hacen porque tienen miedo a enfrentarse a algún tipo de movilización o de presión en la calle por parte de este sector?

-No no, los técnicos son importantísimos en toda la toma de decisiones, les hacemos caso y evidentemente queremos aplicar lo que nos indican. Pero tenemos que conjugar también la situación económica con la sanitaria y lo estamos haciendo de la mejor manera posible. Hemos establecido umbrales, conocidos ya por todos en los comercios y hostelería, y hemos entendido que llegados a unos niveles de contagio teníamos que tomar la medida de adelantar el cierre de las actividades no esenciales o el cierre. Estamos en línea con lo que se ha adoptado en otras comunidades autónomas y gracias a dios la situación va bajando, lenta pero baja.

El punto covid tuvo 2 positivos este jueves, es un dato muy bueno que hacía mucho tiempo que no lo teníamos. Vamos por ese buen camino. Hemos reforzado los controles, hemos contado con Protección Civil, estamos insistiendo en las medidas y la Policía ha extremado sus controles. Se trata de concienciar a los ciudadanos de que la enfermedad esta ahí, que provoca enfermos en el hospital y desgraciadamente muertos. Eso no lo podemos olvidar.

"Se están tomando medidas acertadas, bajando los contagios y dejamos vivir a los sectores económicos”

-El responsable de Medicina Preventiva, Julián Domínguez, voz autorizada en Ingesa, acostumbra a reprochar que las medidas que aplican ustedes siempre llegan tarde. ¿Cuando escucha esas aseveraciones considera que a la Administración le falta coraje para adoptar medidas más duras como propone esta autoridad sanitaria?

-Creo que el señor Domínguez hace sus manifestaciones desde el punto de vista técnico y es totalmente respetable. Lo que ocurre es que nosotros tenemos que conjugar, ya lo he dicho antes, todas las vertientes: la sanitaria, que es la principal, pero también la económica. Tenemos que hacer una conjunción de medidas que salvaguarde el ámbito sanitario y económico. Se están tomando medidas acertadas y estamos bajando índices de contagios, dejamos vivir a los sectores económicos. Detrás de ellos está el empleo de la ciudad que hay que preservarlo de manera absoluta.

Cada uno tiene su papel, tiene que aconsejar desde su punto de vista y nosotros conjugar esos consejos y hacer las cosas de la mejor manera para que la ciudad se resienta lo menos posible de la pandemia y de las consecuencias económicas.

-¿No cree que con esa postura están demostrando ser una Administración débil?

-No. Estoy totalmente convencido de que se toman los pasos con precaución, pensando. Ahí están esos umbrales y en el momento en que lleguemos habrá que cerrar la actividad dos horas antes o hacer un cierre total. Esto además tiene su comparativa con otras comunidades autónomas; Madrid, con un índice superior al nuestro, ha llevado el toque de queda a las once. Estamos con una actitud razonable.

-La Ciudad dicta decretos para controlar los viajes a la Península, el uso de la mascarilla en las cafeterías... pero en realidad no se cumplen como debieran. ¿Qué cara se les queda cuando en la práctica seguimos igual?

-Esto es un tema de responsabilidad por parte de todos. La administración tiene su cuota, tenemos que tomar medidas y queremos aplicarlas, pero tenemos que concienciarnos todos individualmente de que la enfermedad existe, de que mata, que está ahí y de que todos debemos intentar cumplir las medidas sanitarias. Que haya personas que se saltan estas medidas no beneficia a nadie, ni a ellos, ni a los demás ciudadanos, ni a Ceuta, y por tanto apelo a que se cumplan, que se haga caso, que sepan que es una enfermedad grave. La lucha consiste en medidas de responsabilidad por parte de los ciudadanos y la Administración dictando normas y poniendo vacunas.

"Lo que no puede ser es que cada ciudadano tenga un policía detrás, hay un ámbito de libertades que cumplir”

-Pero es una postura algo conformista ¿no? La Navidad, aquello de ‘salvarla’, también la dejaron en manos de la responsabilidad ciudadana y mire las consecuencias que hemos tenido...

-No, no es una postura conformista, es la única que hay: de poner normas y de que se cumplan. Lo que no puede ser es que cada ciudadano tenga un policía detrás. Hay un ámbito de libertades que hay que cumplir. No es tirar la toalla, dictamos normas que hay que cumplirlas.

-Llegará la Semana Santa en breve, ¿relajarán las medidas como en Navidad para ‘salvarla’ también?

-Todavía se están analizando las medidas a futuro. El actual decreto está en vigor, habrá que ver ese decreto que será continuista, pero vamos a continuar más o menos prorrogando las medidas actuales. No hemos tenido que poner objetivos de fechas, las cosas deben ir a su ritmo bajando la incidencia acumulada, vacunando… Ya veremos cómo se desarrollan las circunstancias. Ahora mismo estamos analizando otros temas pero este lo trataremos: la idea es seguir manteniendo las medidas.

"Mi opinión es que en la situación actual no se debe abrir la frontera, es lo que vamos a mantener”

-Las vacunas están llegando poco a poco, no al ritmo deseado, ¿cómo valora esta situación?

-Dependemos de las vacunas que nos vayan llegando del Gobierno. Llegaron 5.520 dosis, 700 de AstraZeneca este viernes y a día de hoy hay un 88% de vacunación, por encima de la media nacional. Nuestro ritmo es bueno, hemos atendido al colectivo de más de 80 años, a las fuerzas de seguridad; este domingo empezamos a vacunar a los que tienen entre 70 y 80 años, el lunes volvemos a los que tienen más de 80... Tenemos preparado también empezar por la tarde el punto de vacunación de la ciudad, pero para eso hay que recibir vacunas. Y ya se está preparando que si hay una llegada de vacuna masiva, activar otros puntos de vacunación, pero lo importante es que lleguen.

-No se puede hablar de tiempo en el que estará la amplia mayoría de la población vacunada mientras no se asegure esa llegada de vacunas...

-Calculo que para hacer esto, en tres o cuatro meses hay que multiplicar la vacunación en torno a cuatro veces lo que se está haciendo ahora. Tenemos que tener muchas más vacunas de las que hay. En la situación actual, al ritmo que vamos, si no llegan más vacunas probablemente la semana que viene pudiéramos estar con el stock acabado.

"Estamos dentro del plazo de incoaciones y notificaciones de las sanciones relacionadas con el covid”

-¿Y qué dice el Ministerio?

-Tiene interés en que lleguen vacunas a España pero es un problema de la Unión Europea. Nosotros estamos deseando que lleguen, porque al ser una ciudad pequeña podríamos ser hasta una ciudad piloto para vacunar de manera masiva.

-Aunque no es un asunto de su competencia, ¿es partidario de una apertura de la frontera con Marruecos como está la situación?

-Mi opinión es que en la situación actual no se debe abrir la frontera, es lo que opinamos y lo que vamos a mantener en todos los foros e instituciones en los que podamos.

-Hablaba de las vacunaciones, ¿qué le pasa con los funerarios, se han olvidado de ellos?

-No, no nos hemos olvidado de nadie. Entiendo a todos los colectivos, es verdad que muchos están en primera línea y lo han estado, pero seguimos escrupulosamente la estrategia de vacunación del Ministerio y no se les recoge. Tenemos que cumplir los criterios. Cuando podamos hacerlo vía criterios por edades, veremos si podemos priorizar colectivos pero es algo que va a ser difícil. Pero aquí no se ha olvidado a nadie.

Sobre los funerarios: “No se les recoge en la estrategia de vacunación, hay que seguir los criterios”

-Como responsable de Gobernación, ¿está habiendo problemas para tramitar las sanciones que se interponen vinculadas al covid, existiendo riesgo de que luego no se puedan cobrar?

-Me consta que los expedientes están abiertos, he firmado resoluciones al respecto pero son procedimientos que llevan su tiempo. Hay un año para incoar esos expedientes, desde el punto de vista administrativo se están incoando antes, son seis meses desde que se notifica la incoación y no se han cumplido los plazos. Son volúmenes muy grandes para lo que no estábamos preparados, pero los plazos son los que son y estamos dentro del plazo de incoaciones y notificación de sanciones.