La Autoridad Portuaria de Gibraltar ha confirmado la existencia de una fuga de fueloil pesado en el buque granelero OS35 que se encuentra varado en la cara Este del Peñón desde su colisión, el lunes por la noche, con otro buque. Esto ha hecho que aumente la inquietud ante el riesgo de los efectos que pueda producir este vertido en el Estrecho y de si podría llegar hasta Ceuta.
Según ha dado a conocer el Gobierno gibraltareño en una nota de prensa, una pequeña cantidad de dicho vertido ha escapado por el perímetro de la primera barrera de contención que en un primer momento se había dispuesto.
La rotura en el casco ya ha producido algunos vertidos de gasóleo que, incluso, han logrado filtrarse más allá de las barreras anticontaminación dispuestas por el dispositivo coordinado entre Gibraltar y España.
Además, el equipo de rescate a bordo ha identificado la fuente de esta fuga en dos respiraderos de los tanques de combustible del buque. Todos los respiraderos habían sido sellados previamente, pero el cierre de dos de ellos se aflojó en el desmoronamiento del depósito.
Los buzos desplegados en la zona han podido restablecer los sellos, por lo que la Autoridad Portuaria gibraltareña está "en proceso de detener" la liberación de líquido de los respiraderos.
La formación 'J' de la Autoridad Portuaria de Gibraltar y el buque español de Salvamento Marítimo 'Luz de Mar' están operando en la zona para recoger el vertido que se halla en la superficie.
Para ello van a desplegar una segunda barrera para evitar su expansión. Del mismo modo, se están desplegando 'skimmers' a bordo para comenzar a recolectar la parte del vertido que se mantiene dentro de la primera barrera. Por otra parte, la barcaza para la extracción del combustible se acercará "en breve" al buque para comenzar a bombear, añade el comunicado.