Este día 32 de
confinamiento en las casas, la nota del día la pone el reparto de las
mascarillas. Ha sido un visto y no visto, al menos en el transporte público. Y es que
en cuestión de horas se han agotado las que se habían dado a los conductores de autobuses para que procedieran a su reparto a los que utilizan ese transporte público para su desplazamiento. Los responsables de los vehículos ya no tenían material, resulta incongruente que se establezca una norma, que sea obligatorio para los usuarios del bus dotarse de una mascarilla cuando los recursos entregados son mínimos. En las farmacias el reparto se hace siguiendo criterios como la entrega a personas mayores de 60 años o integrantes de grupos de riesgo ya que hay que valorar el tiempo en el que esas protecciones siguen teniendo validez ya que tienen una caducidad.
A Ceuta siguen llegando muchas mascarillas, pero en la calle la gente se pregunta dónde están, cómo las puede obtener… en definitiva, cómo pueden protegerse si no disponen de los recursos ni tampoco los encuentran. Es una especie de mundo al revés que intenta ser enderezado sin éxito.
A pie de calle se echa de menos más presencia policial. Los ceutíes ponen de manifiesto que hay quienes se han relajado en el cumplimiento de las medidas de confinamiento establecidas para todos. No cumplirlas va en contra de esta batalla. No obstante Delegación del Gobierno presenta datos: desde que se decretó el estado de alarma las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la Policía Local han impuesto un total de 2.169 propuestas de sanción y detenido a 22 personas. Se recuerda que todos los ciudadanos que se desplacen, tanto a pie como en vehículos, deberán llevar consigo el documento que certifique que su movilidad esta justificada, certificado emitido por su empresa, que avale su desplazamiento a su lugar de trabajo. De lo contrario serán sancionados. El criterio de tolerancia cero se sigue aplicando.