El magistrado titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta ha condenado a la llamada A.S.R. a tres meses y un día de prisión por un delito de estafa informática, toda vez que en enero de 2022 cooperó para causar un daño en el patrimonio de una joven a la que sustrajeron de su cuenta 500 euros mediante la técnica del phishing.
La acusada, que declaró por videoconferencia, reconoció la comisión del delito en concepto de cooperadora aceptando así la pena impuesta que queda suspendida durante un periodo de dos años. En ese tiempo si vuelve a delinquir se le revocaría dicha suspensión.
En la sentencia dictada in voce y fijada por conformidad se tuvo en cuenta que la ahora condenada había reparado el daño al haber indemnizado a la víctima por los perjuicios ocasionados tras haber ejecutado el abono del dinero perdido. Se aplicó por tanto esa atenuante.
La estafa y el método phishing
Así las cosas, el 15 de enero de 2022, a través de internet, terceras personas no identificadas realizaron una transferencia desde la cuenta bancaria de la perjudicada a la tarjeta virtual de la entidad Rebellion Pay que la ya condenada creó solo días después.
Se habían obtenido los datos de la víctima mediante la manipulación informática conocida como phishing y fue así como accedieron al dinero.
En la resolución judicial se ha concretado que la acusada había cooperado para que ese capital estuviera en uso de terceras personas no identificadas.
La Jefatura Superior de Policía invirtió meses en hacer campañas didácticas a través de los medios de comunicación para evitar precisamente este tipo de delitos, alertando a la población de cuantiosas formas de engaño que se usan para, por ejemplo, suplantar la identidad de bancos y así robar claves e identidades de particulares.