Noticias

Las concertinas que España rechaza y Marruecos reutiliza en la valla

Fue en diciembre de 2019 cuando el Gobierno de España comenzó la retirada de concertinas en la valla de Ceuta. Gradualmente ejecutó la instalación de peines invertidos y tubos; elementos que, dos años después, no se han colocado en su totalidad dejando partes del vallado completamente desnudos y sin un mantenimiento que garantice la seguridad exigida y recogida en el plan Marlaska. Esas concertinas que retiró España para visibilizar otra forma de control han ido terminando en Marruecos. Las autoridades del vecino país no paran de colocar las alambradas en los tramos de valla que levantan en su terreno y en las nuevas infraestructuras de seguridad que dispone a lo largo de los más de 8 kilómetros de perímetro que comparte con Ceuta.

La valla fortaleza es el concepto asumido. Así, al aumento de concertinas se suma la cada vez mayor presencia estable de asentamientos marroquíes que vienen a cumplir la misión de vigilancia frente a lo que no es más que la meta deseada por los subsaharianos que aspiran a poder cruzarla. Una misión cada vez más complicada y que convierte el perímetro fronterizo de Ceuta en una vía cerrada para las entradas masivas pero más permeable para los acercamientos de pequeños grupos que, de forma aislada, consiguen el salto ya que su detección es más compleja debido al nefasto mantenimiento de los sistemas de alarma y su capacidad de reacción, algo que ya fue denunciado por la Asociación Española de la Guardia Civil, AEGC.

Marruecos escenifica ante Europa su papel de gendarme en la frontera sur, sin estar dispuesto a provocar otra grave crisis internacional como la de mayo, que generó una reacción unánime y una condena del Parlamento Europeo.

La Europa fortaleza olvida, a este lado del paso, las críticas al uso de los llamados métodos cruentos al avalar, con su silencio, la cada vez mayor presencia de alambradas no solo en el vallado marroquí sino en las rutas seguidas para la llegada hasta Ceuta.

Son las sombras de un perímetro convertido en un saco sin fondo en cuanto a la inversión de millones para su construcción, mantenimiento y colocación de sistemas de control.

Entradas recientes

Café y fogones para construir una vida

Sirve con delicadeza la leche. Presto y sigiloso, deja en la barra dos cafés acompañados…

20/11/2024

A prisión tras el atraco a un repartidor de comida a domicilio

La autoridad judicial ha ordenado el ingreso en prisión a la espera de juicio de…

20/11/2024

Edith Rivas presenta esta tarde su último libro, ‘El alma importa”

Edith Rivas, fundadora y directora de Centro Global2, ha publicado recientemente su segundo libro, ‘El…

20/11/2024

El estallido de Vox

Vox ha terminado por estallar. Y eso que la crónica ni siquiera ha atravesado el…

20/11/2024

Disciplina legionaria

Las características especiales del Tercio de Extranjeros, su forma peculiar de nutrir sus filas, admitiendo…

20/11/2024

La llegada de los Regulares

Tal día como hoy hace 90 años, el Faro de Ceuta, diario decano de la…

20/11/2024