La Comunidad Israelita de Ceuta volvió a rendir un sentido homenaje en el Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto, que masacró a más de 15 millones de judíos a manos de la barbarie nazi y que se recuerda cada 27 de enero, este año en la sinagoga. Diferentes representantes de los partidos políticos se han dado cita con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, en cabeza. Integrantes del PP, PSOE, Vox y Ceuta Ya! fueron los que estuvieron presente acompañando al colectivo judío. Este año se cumple 77 años de la llegada de las tropas soviéticas a Auschwitz-Birkenau, el campo de exterminio más grande conocido por la humanidad y con el recuerdo de otros campos de concentración en Polonia, los Países Balcánicos y Alemania.
El sencillo acto ha comenzado con las palabras del representante de la Comunidad Israelita, Jacob Hachuel, que ha reconocido que tiene “muchas dudas” sobre si la sociedad ha aprendido algo durante todos estos años. Ha reconocido que cree “firmemente” en que debemos ser responsables de lo que decimos. “En enero, cuando se recuerda esta tragedia, cumpliendo el mandato de recordar a quienes encontraron una tumba en el aire, en palabras de un verso de Paul Celan, me pregunto, como Yehuda Bauer, si hemos aprendido algo. Y escuchando las voces de la actualidad, tengo muchas dudas. Por eso, creo firmemente en la necesidad de ser responsables de lo que decimos, cumplir las leyes y castigar el discurso del odio al otro, al diferente. Y porque creo firmemente en la importancia de cada persona, también valoro cada una de sus palabras”, ha reseñado.
Asimismo, Hachuel ha recordado a todos los presentes que lo urgente en estos momentos es “asegurar las leyes” para que éstas no se deformen provocando gobiernos autoritarios que estimulen a barbaries como el holocausto. “Quizá hay que seguir intentándolo, pero lo cierto es que el peligro persiste. Lo urgente en primer lugar son las leyes y asegurarnos mecanismos para que éstas no se deformen por la deriva de gobiernos autoritarios, como sucede ahora en algunos países no tan lejanos del nuestro. Hoy muchos ciudadanos (políticos o no) quieren perjudicar a sus adversarios (políticos o no) comparando sus acciones con la shoah. ¿Cuál es el límite? ¿Cómo responder? Estas cuestiones son las que nos apelan hoy. Resolverlas también hablará al futuro de quiénes somos”.
Tras este discurso se produjo una oración en castellano y en hebrea por las miles de víctimas, estando los presentes en pie en forma de respeto.
Por último, los representantes políticos y generales de la Ciudad encendieron unas velas, como cada año, para rememorar a los fallecidos, mientras que le acompañaba la música con un violín.