El Comité de Empresa de Trace mantiene la convocatoria de huelga para el próximo miércoles 26 de septiembre, a partir de las 00.00 horas, y amenaza con no permitir que salgan a trabajar los servicios mínimos que la Ciudad ha interpuesto porque "atenta contra la labor sindical y contra los trabajadores".
Según los Juan Gutiérrez, secretario general del Comité, la Ciudad pretende destinar más del 50% de la plantilla a los servicios mínimos ofrecidos por la huelga, un porcentaje que considera "desorbitado". "No lo vamos a permitir: ¿Qué medida de presión podemos hacerle a la patronal con este número de trabajores haciendo su labor?", se ha preguntado.
De esta forma, el Comité de Empresa ha anunciado que sólo saldrá en cada turno un vehículo recolector con tres operarios, un conductor y dos peones, para realizar la recogidas de centro penitenciario, colegios, hospitales, CETI, residencias o mercados.
Los motivos
Por el momento no han tenido noticias desde la
rueda de prensa de hace tres semanas, en la que los representantes de los trabajadores anunciaron una nueva convocatoria de huelga al sentirse "usados" por la concesionaria de limpieza para "chantajear” a la Ciudad". Según explicó el presidente del Comité en rueda de prensa, Francisco Manuel Mur, el pasado 4 de septiembre estaba convocada la Mesa Negociadora para firmar el convenio convenio colectivo de los trabajadores, que Trace se ha negado a firmar.
Mur recordó que este convenio ya se firmó entre todas las partes el pasado 18 de julio, pero que tenía un error de forma, por lo que fue devuelto por la Delegación de Gobierno para su corrección. Una vez subsanado, se convocó de nuevo para la firma el día de hoy, pero en esta ocasión, Trace, quien ostenta la mayoría en la Mesa Negociadora Colectiva, se ha negado a firmar.
Según detallaron desde el Comité de Empresa, la subida salarial establecida en el convenio sólo que está aplicando a las nóminas de los trabajadores de Trace, pero no a los de ACC y TAHLER, incluidos también en este convenio de limpieza. La excusa de la empresa es que la Ciudad no ha cumplido con el convenio de la subida salarial, cifrado en 300.000, ya que la Administración alega que Trace no está cumpliendo con todos los servicios por los que está contratada.