La Consejería de Sanidad y
Asuntos Sociales del Gobierno de Ceuta ha comenzado este miércoles el reparto entre perceptores del Ingreso Mínimo Vital (
IMV) de las 545 tarjetas monedero de
Carrefour con un importe de 110 euros cada una para comprar productos de primera necesidad que ha adquirido con el objetivo de promover la participación en un proyecto piloto de inclusión. La cadena de origen francés fue la única que se presentó a la licitación convocada con un presupuesto base de casi 60.000 euros por parte del departamento que dirige Nabila Benzina.
El importe de cada tarjeta se podrá utilizar durante seis meses a contar desde la fecha de entrega. Todas cuentan con un número identificativo de control que permitirá verificar que su carga se dedica a la compra de “productos de alimentación, higiene y limpieza única y exclusivamente”.
La Ciudad encargó el año pasado a Tragsatec la ejecución de un proyecto de evaluación de la inclusión social de
beneficiarios del IMV con tres grupos de análisis: uno que recibe entrenamiento en competencias personales, otro que lo hace en competencias personales y digitales y uno más que no recibe tratamiento alguno. El objetivo de la iniciativa es “evaluar el resultado y/o impacto en las personas participantes de los entrenamientos diferenciales en los grupos de tratamiento respecto al grupo control”, pero para que sus resultados sean concluyentes se estableció la necesidad de que todas las personas participantes en cualquiera de los grupos contestasen de manera efectiva a los cuestionarios en la fase pos-test para que se pudieran comparar con los datos recogidos en fases anteriores. Para animar a la participación efectiva la Ciudad propuso al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones utilizar un incentivo como estas tarjeta monedero, a lo que se dio el visto bueno detrayendo la partida necesaria de la adjudicada inicialmente al medio propio.