El incendio ocurrido en la zona de Calamocarro ya está perimetrado y estabilizado. Los medios aéreos han sido determinantes para controlar unas llamas contra las que han luchado, a pie de campo, los hasta 56 bomberos destacados en el lugar. Ante el temor de que el viento complicara las labores desarrolladas, se ha contado con la participación de un helicóptero del Ministerio de Agricultura KZ 53 Almoraima, que estuvo hasta las 17.00 aproximadamente, hora en la que regresó a su base. El agua se esperaba para evitar que las llamas se extendieran, ya que el viento hizo temer lo peor. De hecho se tuvo que ordenar el desalojo de personas que estaban en las proximidades debido a la gran cantidad de humo generada, entre ellas los internos del centro de Punta Blanca, que pudieron regresar en torno a las 17.30 horas. A pie de terreno los bomberos recibían la cascada de agua. Se han hecho los viajes que han sido necesarios, garantizando que las llamas no se reavivaran como se estaba temiendo. Y es que había momentos en los que todo apuntaba a que la situación podría descontrolarse. Ahora ya se trata de averiguar los daños causados en el segundo de los incendios ocurrido en el mismo lugar, el arroyo de Calamocarro, de gran valor ecológico.
Investigaciones en marcha
La Guardia Civil ha confirmado que no hay detenidos. Sí que sobre el terreno se practicaron varias identificaciones de personas ante la sospecha de que pudieran estar relacionadas con lo ocurrido. No ha sido así. No hay detenidos ni una línea clara de investigación que lleve a qué hay detrás de este episodio. Se va a garantizar un control sobre el terreno ante el miedo a que el fuego pueda reavivarse. Sobre el lugar se ve ya el estado en que ha quedado la zona que fue foco de las llamas. Todo quemado. Otro nuevo episodio de desastre forestal que daña a la Madre Naturaleza. El Gobierno de la Ciudad ha dado por controlada la situación después de que hubiera dictado el nivel de alerta 1.