Continúan las agresiones a los profesionales sanitarios en Ceuta. Durante la última semana, el Colegio de Médicos ha registrado tres nuevas denuncias de diferentes facultativos que han visto "amenazada su integridad física" en el desarrollo de su jornada laboral.
Durante la mañana de este lunes, un médico del centro de salud del Tarajal ha sido "amenazado de muerte" por el familiar de una paciente, ha indicado el órgano colegial en una nota de prensa. El agresor ha irrumpido "violentamente" en la consulta del doctor, exigiendo que atendieran a su hija y le realizaran pruebas de diversa índole, "sin respetar el turno y amenazando al médico".
Tales han sido los hechos, que han tenido que intervenir "tres guardias de seguridad del edificio" y, posteriormente, se ha llamado a la policía, la cual ha detenido al agresor "inmediatamente", como apunta el Colegio de Médicos. En el mismo centro, otra profesional del servicio de Pediatría tuvo que "atrincherarse" en la consulta el viernes anterior debido a las "amenazas" de un paciente. Como condena a estos hechos, el centro de salud del Tarajal ha convocado un paro de 10 minutos este martes 24 de septiembre, a las 12.00 de la mañana, en las puertas de su edificio, en el Hospital Universitario.
En adición a estos sucesos, el pasado martes, el Colegio de Médicos tuvo constancia de que una facultativa de Ceuta fue "amenazada e insultada" por un familiar de un paciente que se encontraba en la sala de espera de urgencias. "El incidente se cerró con la llamada a la policía por parte de la profesional, la cual interpuso una denuncia para evitar consecuencias mayores. Según el testimonio de la doctora, la policía acudió inmediatamente al centro, el agresor fue detenido y paso la noche en los calabozos", ha comunicado esta institución de representación de los facultativos.
El Colegio de Médicos de Ceuta reitera su condena a cualquier acto de violencia sanitaria y expresa su indignación ante estos nuevos casos de agresiones a profesionales de la salud. Desde la institución se quiere recordar que todos sus miembros tienen a su disposición un seguro de protección de asistencia jurídica para estos incidentes. Además, alienta a los facultativos a que ante cualquier acto en el que se vean intimidados, amenazados o agredidos, denuncien para poder poner fin a este tipo de acciones que cada vez son más frecuentes.
El Sindicato Médico de Ceuta condenó estas tres nuevas agresiones y se explicó que se unirá al paro convocado de 10 minutos a las 12.00 horas de este martes 24 de septiembre por el personal del Centro de Salud del Tarajal, como condena a las agresiones verbales y amenazas sufridas por dos de sus compañeros médicos.
"Queremos reivindicar la falta de seguridad con la que los médicos deben realizar su labor diaria y el peligro al que se exponen en cada jornada cuando acuden a su puesto de trabajo", comentan en un comunicado. "Resulta angustioso, frustante y deprimente que los médicos de Ceuta tengan que enfrentarse a esta oleada creciente de agresiones, y nos tememos que cualquier día la situación derive en una desgracia personal irreparable", añaden.
Por su parte, el Ingesa también lamentó este nuevo episodio de agresiones verbales. "Volvemos a condenar estas agresiones y queremos mostrar todo nuestro apoyo y solidaridad con nuestros profesionales", comentaron desde el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria.
El Ingesa recordó que dispone de protocolos para que la persona que ponga en conocimiento una agresión reciba el asesoramiento necesario para emprender acciones legales, siempre manteniendo el anonimato. Además añadió la importancia de que los profesionales denuncien este tipo de agresiones "porque es la única manera de acabar con esta lacra", además de que está considerada como un delito de atentado en los tribunales de justicia.
No es la primera vez este año que ocurren agresiones a los profesionales sanitarios. El pasado julio, cuatro personas del equipo médico del 061 fueron retenidas y atacadas, tras una intervención a domicilio. Según explicaron los afectados, el agresor intimidó a los sanitarios y les atacó, provocándoles diversas lesiones. Tras este incidente, el atacante fue detenido y puesto a disposición judicial. El Colegio de Médicos se presentó como acusación popular para mostrar, nuevamente, su repulsa a este tipo de incidentes y apoyar a los afectados.
Enrique Roviralta, presidente del Colegio de Médicos de Ceuta, ya mostró su preocupación sobre la violencia sanitaria en la concentración que se realizó en repulsa de tales hechos. Roviralta explicó entonces que las "medidas actuales no son suficientes, puesto que se dan agresiones. Es más, van en aumento". Además, el colegiado añadió que entiende que las medidas que se requieren son complejas, pero que deberá trabajarse en conjunto para avanzar y añadir medidas legales, judiciales y desde la administración sanitaria para detener estos incidentes.
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